Estados Unidos y sus aliados occidentales, acompañados por el régimen de Israel, Turquía y Arabia Saudí planifican, bajo la doctrina exterior de la Administración de Barack Obama – la denominada Leading From Behind – la estrategia de desestabilización de la república de Siria.Tal hipótesis es posible visualizarla a partir del papel que ha cumplido Estados Unidos, la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) y el propio régimen de Israel, con las ideas y acciones destinadas a derribar lo que se consideran regímenes árabes corruptos y políticamente inestables, desde el punto de vista del apoyo incondicional, que se supone debían tener a Occidente.
El lobby sionista, (Comité de Asuntos Públicos EEUU–Israel -AIPAC) y la oposición de los republicanos al acuerdo nuclear con Teherán, muestra que los sectores belicistas del eje Washington- Tel Aviv no cejan en su odio y su política de cerco contra Irán.Ello conlleva fuertes presiones contra la Administración de Barack Obama, que se juega con este acuerdo la recuperación de algo de la credibilidad frente a sus electores y el mundo con relación a tantas promesas incumplidas.Ronald Dermer, embajador del régimen israelí en Washington ha tenido semanas intensas de reuniones con legisladores estadounidenses, mayoritariamente republicanos, a quienes trata de convencer de oponerse a cualquier aprobación del acuerdo nuclear con Irán, bajo el argumento, que representa un peligro para la seguridad nacional de Estados Unidos y de Israel.
Entrevista del Diario Uchile Internacional con el analista internacional, Pablo Jofré LealEn ese sentido, destacó la hospitalidad de los asiáticos a la hora de compartir su historia. Una de sus más grandes sorpresas fue como occidente mitifica el rol de la mujer: “no se puede juzgar por un pañuelo mas o un pañuelo menos”. Sobre el desarrollo atómico del país y el acuerdo que en julio firmó con las grandes potencias, Pablo Jofré relató que “más allá de las diferencias que se puedan tener con Irán, hay que reconocer sus muestras de soberanía y dignidad, pese al acoso estadounidense”, logrando mantener un desarrollo pacífico del programa nuclear iraní. “La persecución a esto fue un montaje, una demonización de Estados Unidos e Israel, pese a que los norteamericanos impulsarán en 1953 los inicios del plan”, explicó. “Es pacífico y eso es visto cuando Irán es firmante del Tratado de no proliferación nuclear y cuando asume cada una de las inspecciones a diferencia de Israel, que es un aliado de Estados Unidos y no ha sido atacado por la comunidad internacional”, agregó.
Esta idea y conducta de la islamofobia, ha tenido un lento y sostenido discurrir, han sido influidas por una serie de una serie de acontecimientos, que tiene su momento catalizador con la lucha llevada a cabo por grupos armados contra la invasión de la ex Unión Soviética  - URSS -  a Afganistán, entre los años 1979 y 1989, desarrollándose, a partir de allí una serie de movimientos integristas, que basaban su actuar político en concepciones radicadas en la doctrina takfirí y Wahabita. Grupos aliados de occidente en ese momento, enfrascados en una lucha con el Bloque de países liderados por la ex URSS...No es posible entender el desarrollo de Al Qaeda sin el financiamiento de Madrazas en Paquistán y Afganistán o la fortaleza  de EIIL  - Daesh en Árabe - sin el sostén dado en su oportunidad por Arabia Saudita, las Monarquías Árabes del Golfo Pérsico y la luz verde dada por Washington para el surgimiento y evolución de estos grupos destinados a enfrentar a los enemigos de los intereses de Estados Unidos y el Régimen de Israel en la zona de Oriente Medio.
Desde la perspectiva irani, Soberanía y Dignidad,  son dos conceptos fundamentales que se extraen del acuerdo logrado en la ciudad de Viena, por el gobierno de Irán con el denominado G5+1 – conformado por los miembros permanentes del Consejo de Seguridad: Rusia, China, Estados Unidos, Francia, Inglaterra más Alemania. Acuerdo, que tal como lo declaró Irán, no ha traspasado las líneas rojas definidas por este país y que eleva considerablemente su estatura política y aumentando claramente sus grados de influencia.El canciller iraní, Mohamad Yavad Zarif, y la jefa de la Diplomacia Europea, la italiana Federica Mogherini anunciaron oficialmente el fin de los diálogos nucleares entre Irán y el Grupo 5+1 y los consiguientes acuerdos, tras largos meses de conversaciones. El 14 de julio se convierte asi en un  día histórico para la República Islámica de Irán, donde se reconoce a la nación persa el derecho a desarrollar su programa nuclear, se avanza en la eliminación absoluta de todas las sanciones que han pesado sobre ella y se devela, ante la comunidad internacional, quienes son los verdaderos enemigos de la paz, aquellos que sí poseen armas nucleares y que no permiten inspecciones,  que no son firmantes del Tratado de No Proliferación Nuclear – TNPN – o financian, avalan, organizan y protegen a grupos terroristas, que generan la inestabilidad que afecta a Medio Oriente.
Venir desde el sur del mundo, específicamente desde Latinoamérica y aterrizar en la República islámica de Irán implica recorrer medio mundo. Cruzar el Atlántico, el Mediterráneo y adentrarse en la cuna de la civilización y asombrarse frente a una cultura milenaria pero, sobre todo comprender y reafirmar que la vida tiene más de una mirada... Mis primeros días en Teherán han sido una experiencia deliciosa: gente amigable, generosa, sonriente, distinta, pero eso jamás ha sido un impedimento para reconocer en el otro un ser humano con su riqueza, su cultura, su historia y una forma de ver el mundo que a partir de esa diferencia enriquece tu propio ser. No me quedaré, en estas letras, en la absurda y arcaica discusión de las vestimentas, que si usa un pañuelo, un shador o cualquier otra excusa prejuiciosa, cuando a quien tengo enfrente sonríe, le brillan los ojos, pregunta y responde con el mismo interés de este visitante ávido de llenarse de “iranismo”.
Tras la muerte del nonagenario Monarca Abdolá bin Abdulaziz al Saud el 22 de enero del año 2015, esos cambios se dan en el marco de la agresión de Arabia Saudita a la República de Yemen, secundada en esta acción violatoria del derecho internacional, por una coalición de países – principalmente monarquías árabes ribereñas del Golfo Pérsico – que responden a los objetivos de la triada Washington-Riad-el régimen de Tel Aviv. Propósitos destinados a mantener su hegemonía política y militar en Oriente Medio, tratando en ello de contender contra la República Islámica de Irán, devenida en fuerte oponente a los planes de esta triada y sus apoyos a los movimientos terroristas takfirí, que operan tanto en Siria, Irak como en la propia Yemen.
Desde el año 1979 a la fecha, la historia de relaciones entre Irán y Estados Unidos – a lo que sumamos a socios de este último país como Inglaterra, Francia e Israel, principalmente - ha estado teñida de tensiones. Ya sea a través de una guerrilla verbal, como también enfrentamientos que han puesto en alerta a los ejércitos de ambos países y una serie de acontecimientos, que sitúan a este contencioso como uno de los más complejos en el área del Medio Oriente con claras influencias al Asia Central y el norte africano.En un interesante trabajo del joven y talentoso periodista iraní Kourosh Ziabari, este señala que existen una serie de mitos sobre su país, que es necesario desmontar. Ello, porque constituyen, no sólo una demonización de Irán, sino que demuestran cómo se desvirtúa la riqueza cultural de un país milenario “la demonización y aislamiento de Irán forma parte de una campaña integral y polifacética, cuyo propósito es vilipendiar y condenar al ostracismo al mundo musulmán. Proceso intensificado desde los atentados el 11 de septiembre del año 2001 en Estados Unidos, de los que se culpó a los musulmanes y que pusieron en marcha la guerra global contra el terrorismo” guerra bajo los argumentos, definiciones y clasificaciones de Washington y sus aliados incondicionales.