El Estado “Islámico” de Iraq y Siria; EI, ISIS o Daesh - 4

Análisis crítico de su historia y pensamiento

Por Mohammad Ebrahimneyad

Fuentes de financiamiento del EI

El Consejo de Seguridad de la ONU dictó una resolución en el “Artículo 7”[1] de sanciones económicas al EI, en la cual describe las fuentes de financiamiento del grupo del siguiente modo:

1. Personas o instituciones dedicadas a la “beneficencia”; entre ellos Abu Muhammad al-Adnani, el portavoz oficial del EI, de origen sirio y multimillonario que ayuda económicamente al grupo.
2. El EI se apoderó de regiones ricas en petróleo del norte de Siria e Iraq (Deir al-Zur, Al-Haska, Tikrit, Mosul, Diyala, etc.), el cual extrae y vende en el mercado negro a precio barato, obteniendo grandes ganancias. La venta de otros productos petrolíferos y petroquímicos, así como de energía eléctrica producida en las plantas ocupadas del norte de Siria, son otras de las fuentes económicas del EI.[2]
3. El robo de los fondos de los bancos de las ciudades tomadas; se calcula que solo del Banco Central de Mosul se robaron 420 millones de dólares.
4. Las tierras de cultivo de miles de hectáreas, ubicadas a ambos lados del río Éufrates, en los alrededores de Alepo, Raqqa y Deir al-Zur; además de las tierras fiscales y las dotaciones gubernamentales que cayeron en sus manos y que son alquiladas a la gente.[3]
5. Las monarquías del golfo pérsico encabezados por Arabia Saudita, Qatar, Kuwait y Emiratos Árabes Unidos son el principal soporte económico del EI.[4] El apoyo de multimillonarios salafíes y yihadistas de los países del golfo es otra de estas fuentes.
6. Según un informe de la CNN el EI además secuestra ciudadanos turcos, indios y de otras nacionalidades para obtener de esa forma grandes sumas como rescate.[5]
7. Siguiendo las creencias del EI, los restos arqueológicos serían muestras de idolatría, por lo que normalmente suelen dinamitarlos, aunque en el último tiempo algunas de las mafias de tráfico de antigüedades lograron contactarse con el EI y les compran a esculturas, monumentos, pedazos de ciudades enteras, luego revendidas en Europa o Asia.
8. Otra de las fuente de financiación, que no ha sido nombrada en el informe de la ONU, es la ayuda de los países europeos, de EEUU, Qatar y Turquía, entre otros, que dicen ser destinada a la “Oposición Siria” u “Oposición Moderada” al gobierno oficial de Bashar al Assad. El verdadero objetivo de dicha ayuda es debilitar la “línea de la resistencia” (conformada por la alianza Irán-Siria-Líbano) contra la ocupación e invasión sionista al Medio Oriente; así como también debilitar el poder ascendente del chiismo, apoyando por todos los medios posibles a cualquiera de sus adversarios; en palabras del Seied Nasrullah: ¿Cómo es posible que los aliados de ayer [N. del Traductor: calificados como “luchadores por la libertad” por la prensa occidental] a quienes entrenaron, financiaron y criaron bajo protección más de cuarenta estados (con la OTAN, es decir EEUU, Inglaterra y Francia a la cabeza) al cruzar una de sus “líneas rojas”, se volvieron de un día para otro el enemigo? No tienen otras razones que el hecho de que se les fueron de las manos y comenzaron a amenazar sus intereses en la región.[6]

Creencias y pensamiento del EI de Iraq

El primer credo oficial de Al-Qaeda Iraq está en conexión a la época de Al-Zarqawi y fue publicado bajo el nombre de “Aquidatuna y Manahyuna” (“Nuestras Creencias y Métodos”), dividido en dos partes: la Ideológica y la Religiosa. Recientemente el EI lo ha vuelto a publicar, considerándolo como el fundamento de su modus operandi.[7] Algunos de los puntos principales presentes en él:

1. No es suficiente el dar los dos testimonios[8] de fe, si realizamos una acción que contradiga las creencias del Islam, seremos considerados como incrédulos (kafir), aun cuando declaremos ser musulmanes.

De modo tal que desde el punto de vista del EI, no alcanza con los dos testimonios y nuestras acciones son parte del Islam, la misma definición de Islam que tenían los Jawariy.[9]

2. Creemos que las tradiciones y dichos proféticos son una “segunda revelación” que aclara y explica el Corán. No cruzamos la línea entre un dicho o tradición profética sahih[10]y los dichos de otra persona (sea quien sea) y evitamos cualquier tipo de innovación (bid’a), por más pequeña o grande que sea.
3. El amor al Profeta (PB) es obligatorio y una forma de acercarnos a Dios, la enemistad hacia él es incredulidad (kufr) e hipocresía (nifaq) y a través del amor a nuestro Profeta, también queremos a su descendencia (la gente de su Casa=Ahlul Bayt), a quienes respetamos y tenemos en la más alta estima pero no “exageramos” acerca de ellos.
4. La más grande de todas las sedición e intriga (fitnah) desde la creación del Profeta Adán hasta el Día del Juicio, es la del Anticristo (Dayyal) y creemos en que Su Santidad ´Isa (Jesús) volverá, así como también creemos que los “Califas Bien Guiados”[11] siguieron en todo la tradición profética.
5. Creemos que los monoteístas (los que alcanzaron la realidad de la Unicidad) serán salvados del fuego por intervención de Dios y de Sus intercesores, a su vez creemos que la intercesión es un derecho que Dios ha concedido a algunos, entre los cuales de se encuentran aquellos de los que está satisfecho de sus dichos. Creemos en la intercesión del Profeta (PB), quien tendrá un lugar de reverencia en el Día del Juicio.
6. Todo aquél que dé los dos testimonios de fe, expresando su islamización y que no realice acciones que invaliden su religión será tratado como musulmán.
7. Los “Rawafiz” (los chiitas) son idólatras y herejes.
8. Los territorios de los musulmanes, mientras prevalezca en ellos las leyes de los incrédulos, serán considerados como territorios de incrédulos, sus habitantes serán tratados como tales, debido a carecer de un gobierno islámico en ellos y al consecuente dominio de los herejes sobre territorios de los musulmanes. Consideramos como falso el discurso que afirma que “el origen común de las personas es la incredulidad absoluta”: cada cual responde a su situación, algunos son musulmanes y otros incrédulos.
9. Consideramos como incrédulos occidentalizados a quienes siguen las siguientes escuelas y banderas: a los “nacionalistas”, los “patriotas”, los comunistas, los baasistas, etc. Todas pruebas de una incredulidad expresa que invalida su Islam y los coloca fuera de la religión.
10. Creemos en la destrucción de todas las manifestaciones de la idolatría y la prohibición de sus herramientas de difusión, basándonos en una tradición sahih (verificada) del libro Sahih Muslim que es transmitida por Abi Al-Hiay Asadi, quien relata que el Noble Profeta (PB) le dijo al Príncipe de los Creyentes (P): “Te encomiendo aquello por los que fui elegido para mi misión: que destruyas todo los íconos (ídolos) y que derrumbes hasta sus cimientos toda tumba o sepulcro elevado”.[12]
11. La Yihad debe continuar hasta el Día del Juicio y no debe demorarse, en caso contrario los beneficios que trae se pierden. En caso de obtener botines de guerra debe ser dividido entre los muyahidines siguiendo la ley religiosa. Para un muyahid lo más adecuado es continuar siempre la lucha, aun cuando sea en solitario.
12.  En caso de que un incrédulo falte el respeto hacia algo sagrado para los musulmanes debe ser combatido de forma obligatoria y sin ningún condicionamiento. Después de la Fe, no hay nada más imperativo que la lucha contra los enemigos violentos que buscan corromper el mundo y la religión.
13. Los incrédulos herejes (los chiitas y los secularistas), son peores que los incrédulos comunes, por lo tanto, para nosotros es prioridad asesinar a los primeros frente a los segundos.
14. Los fundamentos de la religión son el Corán que nos guía y la espada que nos ayuda. Por lo tanto la Yihad es con la espada, con “garras y dientes” junto a la explicación y la argumentación.
15. Cualquiera que busque otra cosa que el Islam, que se burle de nuestra religión o que levante su espada contra nosotros es considerado como nuestro enemigo.
16. El tomar como referencia a los jueces seculares y a los taguts, siguiendo sus reglas, “parlamentos” y leyes inestables, está dentro de lo que invalida el Islam, siguiendo la aleya:

“Quienes no juzgan siguiendo lo que Dios hizo descender, ellos estarán entre los incrédulos”(Corán 5:44)

17. Todo aquél que diga que ha llegado al mismo estadio espiritual que el Profeta (PB), su descendencia purificada o sus grandes compañeros y califas será considerado como un incrédulo y hereje.
18. Todo aquél seguidor de los occidentales, con sus diferentes banderas y variedades como el nacionalismo, el patriotismo, el comunismo, el baasismo, son considerados incrédulos expresos, que invalidan su Islam y están fuera de la religión; y todas las personas que se envuelva en actividades políticas, como los partidos “Mutlaq”, el de Dalimi, el de Hashimi, y cualquier otro, que buscan reemplazar la religión divina por otra cosa y que están bajo el control de los enemigos de Dios; y ponen alos cruzados occidentales, a los chiitas y al resto de los herejes por encima de los siervos creyentes de Dios; estarán por siempre entre los herejes. El método del “Partido Islámico” (el partido de Tariq al-Hashimi) es herético y propio de los incrédulos. Su conducta y maneras, al igual que la del resto de los partidos de incrédulos y herejes, como el “Partido Ya´farí” o el de Ayad Alawi,[13] no se diferencian y todos sus líderes han caído en la herejía.

Entre funcionarios del gobierno, dirigentes políticos y en general todo aquél que haya ingresado en el gobierno, hasta que no se dicte una sentencia religiosa definitiva sobre sus actividades, queda suspendida su calificación de incrédulos.

19. Todas las personas que ayuden a los ocupantes del modo en que fuere (comida, ropa, medicamentos, etc.) y que tenga como consecuencia su fortalecimiento, será considerado como incrédulo y hereje, estará permitido derramar su sangre (matarlo) y será objeto de nuestra persecución.
20. La Yihad en el camino de Dios, desde la época de la caída de al-Andalus,[14] para liberar las ciudades de los musulmanes es obligatoria para todos y el más grande pecado después de la incredulidad es el negarse a participar de ella.
21. Cualquier territorio de los musulmanes, desde el momento en que se ve forzado a seguir las leyes de los incrédulos, prevalezcan en él sus reglas y se nieguen las leyes islámicas, será considerado como un territorio de incrédulos, no teniendo como consecuencia necesariamente el que sus habitantes sean considerados incrédulos.

 Debido a que todos los territorios islámicos hoy día han aceptado las leyes y reglas de los Taguts, nosotros consideramos a todos sus gobernantes incrédulos y herejes, así como a sus ejércitos y consideramos el ajusticiarlos aun más obligatorio que el eliminar a los cruzados occidentales.

22. Exterminar a los policías de los Taguts y herejes o todo el que trabaje para ellos es obligatorio: sean guardias de las instalaciones petroleras, de edificios o fundaciones que se sepa trabajen para los Taguts, o que sean sus asentamientos.
23. Hoy día los grupos de la “Gente del Libro” (cristianos y judíos), los sabeos y otros similares, son considerados como enemigos del Estado Islámico y no se cuentan entre los protegidos por él; debido a que rompieron su pacto numerosas veces de diversas formas. Por lo tanto, en caso de desear seguridad y tranquilidad, deberán volver a pactar con el Estado Islámico y respetar las condiciones establecidas de por vida, en caso contrario volverán a su estado previo.

Comunicados del EI de Iraq

Abu Omar al-Baghdadi, el líder de al-Qaeda Iraq después de Al-Zarqawi, publicó un comunicado en el año 2007, declarando las creencias de este grupo extremista en diecinueve párrafos, de los cuales señalaremos los más importantes.[15] Estudiando estas reglas podemos ver que desde el punto de vista takfirí, solo ellos mismos son aceptables y el resto, aun siendo musulmán, son vistos como herejes, incrédulos e idólatras, es decir, los únicos musulmanes son ellos mismos. Ellos declaran rápidamente la incredulidad de otros, con lo que consideran permitido, incluso obligatorio, eliminarlos y saquear sus bienes y posesiones, aun siendo en realidad otros musulmanes, aun bajo la menor justificación. Poner excusas como el ayudar a los “usurpadores” y a los secularistas, son algunas de sus justificaciones preferidas para violar los derechos, el honor y los bienes de la gente. Lo que puede verse a simple vista es que las creencias del EI están basadas en sus propios comunicados y los de su antecesor, el EI de Iraq.

1. Nosotros creemos en la destrucción de toda manifestación de idolatría y en la prohibición de sus herramientas de difusión, basándonos en una tradición sahih (“verificada”) del libro Sahih Muslim que es transmitida por Abi Al-Hiay Asadi, quien relata que el Noble Profeta (PB) le dijo a Alí (R): “Te encomiendo aquello por lo que fui elegido para mi misión: que destruyas todo los íconos (ídolos) y que derrumbes hasta sus cimientos toda tumba o sepulcro elevado”.

El EI, apoyándose en esta única y rara tradición,[16] destruye todas las tumbas y santuarios de los santos y Awlia’ de Dios que encuentra a su paso. Aún cuando el Sagrado Corán dice acerca de los “Compañeros de la Cueva” (اصحاب کهف):”…Dijeron: «Levantemos sobre ellos un santuario»…” (Corán 18:21);[17] es decir en esta aleya se confirma la legalidad de la construcción de santuarios sobre las tumbas. A su vez la tradición de Abu al-Hiay se contradice con la historia, debido a que en ningún libro de historia se ha documentado que el Imam Alí Ibn Abi Talib (P) haya destruido tan siquiera un solo sepulcro. No solo eso sino que está registrado más bien lo contrario: cuando los compañeros del Profeta conquistaron Irán, Siria y Egipto, no solo no destruyeron ninguna tumba, sino que mostraron sus respetos en los sepulcros del Profeta Ibrahim (Abraham) en Siria y del Profeta Daniel en la ciudad de Shush (Susa). Sumado a que el Profeta (PB) fue sepultado en su casa, que estaría obviamente “elevada por sobre la tierra” (por el simple hecho de ser una construcción). En conclusión, utilizando una tradición desconocida e interpretando equivocadamente el Corán no se puede declarar a todo el resto de los millones de musulmanes como idólatras y faltar el respeto a los santos de Dios y ofender los sentimientos y creencias de quienes los aman.

2. En nuestras creencias, los rafizís (los chiitas) son una secta de idólatras y herejes, que se rehúsan a realizar muchas de las prácticas obligatorias; ningún chiita es musulmán y exterminarlos no solo está permitido, sino que es obligatorio.

Lamentablemente el EI siguiendo los análisis y conclusiones equivocadas de Ibn Taimiah y sus acusaciones sin fundamentos ni bases reales, se dedica a la guerra sectaria, actuando de este modo al servicio de los enemigos del Islam. En palabras del Líder Supremo de la Revolución Islámica de Irán, son ignorantes y su ignorancia lamentablemente los lleva a matar musulmanes, Dios quiera que salgan de la ignorancia.

3. Un musulmán pecador de entre los sunitas, que reza en dirección a la Meca, pero toma vino, fornica y roba, no cae en la incredulidad mientras no considere que lo que hace está permitido.
4. Nuestro punto de vista sobre la fe se ubica entre los Jawariy que exageran por un lado y los muryi’a.[18] Todo aquel que dé los dos testimonios de fe, haciendo expreso su Islam y que no realice acciones que lo invaliden,[19] es tratado por nosotros como musulmán, dejando lo que lleva dentro a juicio de Dios.

 Los Incrédulos deben dividirse en dos grupos: los “grandes incrédulos” y los “incrédulos menores”. Se considera incrédulo a aquél que se compruebe que en sus dichos, en sus acciones o en sus creencias lo es; pero el excomulgar o declarar hereje a alguien determinado y el juicio de su perpetuidad en el infierno debe establecerse sobre la posesión o carencia de las condiciones que lo vuelven un incrédulo. El problema del EI es la aceptación ciega de las creencias de Ibn Taimiah y Muhammad Ibn Abdul Wahhab; la mayoría de las “cosas que invalidan el Islam” de Abdul Wahhab, hoy día son aplicadas ciegamente en las calles de las ciudades por ellos ocupadas. Aún cuando todos los grandes sabios del Islam consideran estas creencias y sus “cosas que invalidan el Islam” como grandes errores, están instaladas en la imaginación errada de los salafíes, afectados por Ibn Taimiah.

5. El seguir los juicios de los Taguts, es decir las leyes seculares, comunitarias, nacionales y parlamentarias, están entre las “cosas que invalidan el Islam”; ya que Dios ha dicho:

 “Quienes no juzgan siguiendo lo que Dios hizo descender, ellos estarán entre los incrédulos” (Corán 5:44).

¡Es sorprendente que los yihadistas utilizan esta aleya para fundamentar su calificación de “incrédulos” o kuffar a todos los gobernantes islámicos, senadores, representantes políticos de los países islámicos y a quienes los apoyen o ayuden; pero sean incapaces de reconocerse en las dos aleyas que siguen:

 “…Y, quienes no juzguen conforme a lo que Dios hizo descender, serán de los opresores”… (Corán 5:45) “…Y, quienes no juzguen conforme a lo que Dios hizo descender, esos serán de los pecadores”… (Corán 5:47)!

6. Respetar y reverenciar al Noble Profeta es obligatorio, poner a cualquier por encima suyo está prohibido y todo aquél que declare haber alcanzado su mismo nivel espiritual, el de los miembros de su familia purificada o de sus grandes compañeros (como los califas “bien guiados” y otros), ha caído en la incredulidad y herejía; por lo tanto, los chiitas y los sufís que consideran a sus líderes en el mismo nivel, cuando no aun más elevados que los compañeros del Profeta, son incrédulos.
7. Del mismo modo, los occidentalizados, en todas sus banderas y variantes, es decir nacionalistas, patriotas, comunistas, baasistas, son expresamente incrédulos y cayeron en algunas de las cosas que invalidan el Islam,están fuera de la religión; y todas las personas que participen de actividades políticas, así como en partidos políticos que buscan reemplazar la religión divina por algo más y que han caído bajo el control de los enemigos de Dios, como los cruzados occidentales, los chiitas o el resto de los herejes; estarán siempre entre los herejes. Dios dice: “…En verdad, los demonios susurran a sus amigos argumentos para que discutan con vosotros y, si les obedecéis, seríais politeístas”(Corán 6:121) del mismo modo que los partidos islámicos (por ejemplo el partido de Tariq Hashimi), es un camino hacia la incredulidad y la herejía, sus modos y origen no se diferencian del resto de los incrédulos y herejes como el partido Ya´farí o Aiad Alawi y todos sus líderes son herejes. Para nosotros no hay diferencia entre que sean funcionarios de un gobierno o dirigentes políticos. Aun así, de modo general quienes estén dentro de un gobierno, no son considerados como herejes hasta que se presenten argumentosreligiosas culminantes.
8. Quienquiera ayude a los “usurpadores”, del modo que sea (ropa, comida, refugio, etc.) y que resulte en su fortalecimiento, serán considerados como incrédulos y herejes y su sangre podrá ser derramada.
9. La Yihad en el camino de Dios, desde la época de la caída de al-Ándalus, para liberar las ciudades de los musulmanes es obligatoria para todos y el más grande pecado después de la incredulidad es el negarse a participar de ella.
10. Cualquier territorio de los musulmanes, en el momento en que se vea forzado a seguir las leyes de los incrédulos, prevalezcan en él sus reglas y se nieguen las leyes islámicas, será considerado como un territorio de incrédulos, no teniendo como consecuencia necesariamente el que sus habitantes sean considerados incrédulos. Debido a que todos los territorios islámicos hoy día han aceptado las leyes y reglas de los Taguts, nosotros consideramos a todos sus gobernantes incrédulos y herejes, así como a sus ejércitos y consideramos el ajusticiarlos aun más obligatorio que el eliminar a los cruzados occidentales.
11. Exterminar a los policías de los Taguts y herejes o todo el que trabaje para ellos es obligatorio: sean guardias de las instalaciones petroleras, de edificios o fundaciones que se sepa trabajen para los Taguts, o que sean sus asentamientos.
12. Hoy día los grupos de la “Gente del Libro” (cristianos y judíos), los sabeos y otros similares, son considerados como enemigos del Estado Islámico y no se cuentan entre los protegidos por él; debido a que rompieron su pacto numerosas veces de diversas formas. Por lo tanto, en caso de desear seguridad y tranquilidad, deberán volver a pactar con el Estado Islámico y respetar las condiciones establecidas de por vida, en caso contrario volverán a su estado previo.
13. Por cierto, los otros grupos de jóvenes yihadistas que se encuentran en el frente de batalla son nuestros hermanos en la religión y nosotros no los consideramos como incrédulos o corruptos; pero debido a que se oponen a algunas de las obligaciones de nuestra época, como ponerse bajo la bandera de la unidad, son considerados rebeldes.
14. Salvar a los cautivos (es decir los yihadistas salafíes en prisión) y el proteger las cosas sagradas de los musulmanes (los yihadistas salafíes) del ataque de los incrédulos (los chiitas y los gobernantes seculares) a través de la guerra es obligatorio. Dijo el Noble Profeta: “Liberad a los cautivos. Es obligatorio proveer el sustento tanto de sus familias, como de las familias de los mártires”; y también dijo: “Todo aquél que esté listo para la guerra, es como aquél que participó de ella, y todo aquél que permita a un miembro de su familia ir a la guerra, es como si él mismo hubiese ido”.
15. Es obligatorio enseñar a la gente los distintos aspectos de la religión. Aun cuando les implique perder algunos de los placeres mundanales. El enseñar algunas de las ciencias profanas que sean necesarias para la gente es obligatorio y enseñar cualquier otra cosa, mientras que no salga fuera de los criterios religiosos, está permitido. Todo aquello que invite a la gente a actos inadecuados y que la ayude a ponerlos en práctica, está prohibido; por ejemplo las antenas satelitales de televisión. Es una obligación religiosa para las mujeres el cubrir sus rostros y evitar el mal uso del velo, así como adherir a la pureza y a la castidad.

Uzman Ibn Abul Rahman al-Tamimi, el responsable del departamento de asuntos religiosos del Estado Islámico de Iraq en la época de Abu Omar al-Baghdadi, explico las obligaciones del EI de Iraq del siguiente modo:

Difundir el monoteísmo en el mundo y eliminar la asociación de otros a Dios y la idolatría (como el pedido de intercesión a los santos que es una clara forma de idolatría), el seguir las leyes de un gobierno basado en lo que Dios hizo descender (opuesto a las leyes de los parlamentos populares soviéticos), implementar las leyes islámicas, a través de jueces y gobernantes islámicos, defender los principios del gobierno islámico y la defensa de todo lo que consideramos sagrado, el conservar nuestras fronteras, el expulsar al enemigo, obtener el zakat y botines de guerra de los enemigos, la limosna y otros cosas del tesoro público, el ayudar a las familias de los fallecidos, los pobres y la gente que necesite de ayuda.[20]

La postura del EI respecto a los líderes de los diferentes grupos y partidos puede dividirse en tres partes. El primer grupo es el de los herejes. Este grupo debido a su apoyo a los usurpadores, son considerados enemigos del EI, es obligatorio eliminarlos y no tienen ningún lugar dentro del Estado Islámico de Iraq. El segundo grupo son los “desviados”. Este grupo no ha llegado a apoyar en la práctica a los usurpadores, sino que el motivo de su desviación ha sido la innovación religiosa y el error entre sus seguidores. El tercer grupo son aquellos que se resisten y combaten a los usurpadores. La posición del EI frente a ellos es el guiarlos y aconsejarlos para que se unan a sus filas.[21]

Posición del EI frente a los chiitas e Irán

Al-Zarqawi, el líder carismático del EI, después de formar la agrupación “Al-Qaeda en los Territorios Rafidain”, nombró a los chiitas como el máximo enemigo y los declaró oficialmente como traidores e hipócritas. Además los declaró como Kafir o incrédulos y consideró el exterminarlos en su totalidad como algo permitido.[22] Al-Zarqawi en su libro ¿Te ha llegado el relato de los “Rafiza” (“los que se rehúsan”)?, adjudica la creación del chiismo a Abdulá Ibn Saba, un musulmán converso de origen judío que se sublevó buscando crear la sedición contra el califato logrando matar al Califa Uzman y considera que sus seguidores fueron denominados chiitas.

Al-Zarqawi analiza las acciones de todos los grupos chiitas (los duodecimanos, los zaidíes, los ismaelíes y el resto de sectas) a lo largo de la historia en contra de los sunitas, realizando enorme cantidad de falsas acusaciones y difamaciones, considerando también a los Bahai,[23] como una de las sectas chitas. En su carta, siguiendo alegaciones propias, interpretando algunas aleyas coránicas y tradiciones proféticas, así como fatwas de varios sabios sunitas del pasado, declara a todos los chiitas como incrédulos. Apoyándose en dudosas fuentes históricas sin sustento, pone a los chiitas a lo largo de toda la historia junto a los judíos y cristianos, con quienes habrían confabulado desde siempre para acabar con los sunitas, declarando externamente su unidad con los sunitas, pero internamente considerándolos como sus enemigos principales, debido a lo cual la unión entre sunitas y chiitas nunca va a ser posible. Al-Zarqawi, llega al extremo en su carta, basándose en hadices absolutamente cuestionables y con débiles cadenas de transmisión, de declarar a los chiitas como enemigos de Ahlul Bayt (la Casa o la descendencia del Profeta), presentándolos como los asesinos del Imam Hussein (P), habiéndolo invitado con trampas a Kufa y después asesinándolo, acusando después de este hecho a los sunitas. Esta carta de Al-Zarqawi contrariaba completamente los planes políticos de la rama central de Al-Qaeda, que se oponía a las disputas sectarias.[24]

Al-Zarqawi, ante el plan que dice tener el chiismo de borrar el sunismo de Iraq, alienta el asesinato de chiitas como defensa “preventiva” y para defender las mezquitas sunitas, afirmando que en caso de no asesinarlos, los religiosos, maestros, médicos y especialistas sunitas caerían en sus garras y serían asesinados. Afirma además que cantidades de mujeres sunitas estaban siendo secuestradas y violadas por la policía chiita en Abu Ghraib.

Al-Zarqawi no se contentó con sus amenazas pasadas y en un mensaje del año del 2005 declaró la “guerra total” contra los chiitas. En este mensaje dijo:

Hago este llamado a todos los sunitas de Iraq: Despiértense de su letargo y abandonen la indiferencia. Estuvieron dormidos por demasiado tiempo. La máquina de guerra para acabar con los sunitas se está moviendo y no se va a detener. La organización de Al-Qaeda en Bainan-Nahrain (Iraq) ha tomado la decisión, debido a que el gobierno de los descendientes de Ibn Alqami[25]y los siervos de los cruzados han declarado la guerra total a los sunitas, de confrontar esta declaración de guerra recíprocamente, declarando la guerra a los chiitas en todos los rincones de Iraq y donde sea que estén”.

Abu Omar al-Baghdadi a su vez, en un discurso del año 2007 utilizando como título de su disertación una aleya coránica (إِن تَنتَهُوا فَهُوَ خَيْرٌ لَّكُمْ) (“Más os valdría renunciar a vuestra hostilidad”)(Corán 8:19) pone como interlocutores a los chiitas iraquíes: “Debido a que os habéis unido a los incrédulos usurpadores, vuestra incredulidad se ha incrementado y os habéis separado de la religión, al punto que los hijos de los beduinos, auténticos instrumentos de los persas (iraníes) , se han vuelto seguidores de los grupos de incrédulos y herejes. Esta mancha quedará para toda la historia marcada en vuestras frentes. Es una costumbre entre vosotros considerar a los enemigos de los sunitas vuestros amigos”.

Abu Omar al-Baghdadi, poniendo como interlocutores a los iraníes, “los hijos de Ibn Alqami el traidor” y considerando a los chiitas como teniendo su origen en Abdulá Ibn Saba el judío, los acusa de destruir decenas de mezquitas sunitas en Irán, de asesinar a cantidades de líderes sunitas y de generar grandes obstáculos para que los sunitas puedan enseñar en sus comunidades.

Como respuesta a Abu Omar al-Baghdadi debemos decir que la cantidad de mezquitas y estudiantes sunitas, incluso de religión, de Irán, en proporción a su población, es mayor que las mezquitas y los estudiantes de religión chiitas.

A continuación Abu Omar Baghdadi acusa a Irán de asesinar a soldados talibanes y de Al-Qaeda en Afganistán en la guerra contra los soviéticos. En el final de su perorata, prohíbe a Irán entrometerse directa o indirectamente en Iraq, diciendo: “Irán no debe ayudar de ningún modo a los “rawafiz” (los chiitas) de Iraq. En caso contrario se enfrentarán a una dura guerra en la que seréis destruidos completamente y vuestras tumbas (santuarios) de magos (mazdeístas o zoroastrianos), no quedará ni una en pie, ya sea en Irán como en cualquier otro país.[26] Por lo tanto advertimos a todos los comerciantes sunitas de Irán y del resto de los países que eviten tener intercambios con los rawafiz[27]”. Por último pide a los sunitas de Irán que se levanten contra el gobierno persa que serán apoyados por Al-Qaeda de Iraq.

Posición del EI frente a los cristianos

El EI, después de que tomó la ciudad de Raqqa en Siria, ofreció a los cristianos de aquella ciudad tres opciones: 1- que acepten el Islam, 2- que se queden en Raqqa a condición de ser considerados como “ahl dhimmah” o “dhimmíes”,[28] a condición de que acepten las reglas del EI, 3-que abandonen Raqqa y sean considerados de entre los incrédulos hostiles. Al respecto, fue publicado un comunicado de Abu Bakr al-Baghdadi en el siguiente contexto:

Está prohibido a los cristianos la construcción y reparación de cualquiera de sus templos e iglesias. Les está prohibido mostrar sus cruces y libros en público. No les está permitido levantar sus voces en sus ritos religiosos. Los musulmanes no deben oír el sonido de sus misas o campanarios, esos sonidos deben permanecer exclusivamente dentro de sus iglesias. No les está permitido realizar actividades en contra del EI o de espiar, o de colaborar con espías. No les está permitido realizar ningún de sus ritos fuera de la iglesia. Si un cristiano desea convertirse al Islam, el resto de los cristianos no deberán oponérsele. Deben respetar al Islam y a los musulmanes y no expresar cuestionamiento alguno respecto a la religión islámica.

El EI, cuando tomaron control de Mosul, tomó las mismas medidas con los cristianos de la ciudad, aun cuando estos habitan la ciudad hace más de 1500 años. Los puso a elegir entre aceptar el Islam, aceptar el estatus de dhimmíes, sin aclarar que impuestos (yizia) deberían pagar; y salir de Mosul sin poder llevarse consigo sus pertenencias y riquezas. Además se apoderaron de todas sus propiedades. A través de los altoparlantes de la ciudad el EI proclamó que: “Los cristianos deben elegir o aceptar el Islam o aceptar las condiciones impuestas a los dhimmíes, de lo contrario tendrán oportunidad para abandonar la ciudad hasta el sábado (21 de Ramadán del año 1435 de la hégira lunar) sin poder llevarse ninguna posesión; luego de tal período solo les quedará como destino la espada”.[29]

La posición del EI frente a Palestina y la guerra de Gaza

Abu Omar al-Baghdadi, en su discurso llamado (انما المومنون اخوه), “Ciertamente todos los musulmanes son hermanos” del año 2009 declaró: “Ayudar a los oprimidos de Gaza es una obligación religiosa”. Al-Baghdadi para subrayar su discurso, trae a colación un hadiz del Noble Profeta: “Ayuda a tu hermano, sea opresor u oprimido”.[30] En su opinión, es obligatorio para todos los palestinos a lo largo del mundo el ayudar a Palestina. Lamentablemente, su llamado a ayudar a los palestinos no son más que palabras vacías, con lo que pretende sacarse la responsabilidad de encima; podemos ver a continuación que dice: “Aun así, lo que nos corresponde a nosotros aquí en Iraq es prometerles a nuestros hermanos en Gaza que no nos detendremos en nuestra lucha contra los principales aliados de los judíos y que pronto venceremos a los ocupantes americanos”.

Del mismo modo el EI de Iraq, en un mensaje visual de su ministerio de comunicaciones, considero la formación del Estado Islámico de Iraq y su apoyo, como más importante que apoyar a los palestinos; debido a que el Estado Palestino está bajo el control del ocupante israelí y no es posible ayudar a los miembros de dicho gobierno y a sus ciudadanos; debido a que están expuestos diariamente a la prisión y a la muerte colectiva. En verdad, ayudarlos no tiene ningún beneficio. En cambio el EI de Iraq además de tener poder como para defenderse a sí mismo, tiene sus territorios bajo control y autoridad, sobre la que basa su gobierno.[31]

Estas justificaciones muestran a claras la identidad verdadera de estos grupos takfiríes. Ellos realmente no están preocupados por los musulmanes y derraman la sangre de los verdaderos musulmanes buscando solo alcanzar el poder y sus fines mundanales, saqueando sus bienes considerándolos “botines de guerra”, mancillando el honor de los mujeres musulmanas, tratándolas como sus esclavas y vendiéndolas en los mercados de trata de personas. Lo mismo que hicieron hace doscientos años atrás la familia saudita (Al-Saud)[32] bajo las órdenes de Muhammad Ibn Abdul Wahhab, que no trajo más que destrucción, asesinato, pillaje y sectarismo para los musulmanes.

Durante la última guerra del régimen de ocupación sionista contra el pueblo indefenso de Gaza, muchísimos de los usuarios salafíes de Twitter, criticando al EI, le pedían a este último que si en realidad buscaban la defensa de los musulmanes y la destrucción de los incrédulos y los judíos, que fuesen a Gaza a luchar contra el régimen sionista. El EI como respuesta publicó un comunicado oficial en su página oficial de Twitter.[33] Contestó que la respuesta estaba en el Noble Corán. Dios, Elevado sea, advierte acerca de los enemigos cercanos, los hipócritas, en Su Libro Sagrado, explicando que son más peligrosos que los incrédulos; es decir, de acuerdo al EI, el peligro de los musulmanes que no aceptan sus doctrinas, es mayor que el del régimen de Israel.[34] En su mensaje, dice que está escrito en la historia que el primer Califa de los musulmanes demoró el ataque a Jerusalén para luchar contra ahl riddah y que solo en la época de Omar Ibn Jattab fue conquistada la Ciudad Santa. Después, de cómo Saladino luchó primero contra los chiitas (fatimíes) de Egipto y Siria, junto a otras responsabilidades, para recién ir a la guerra contra los cruzados. De Saladino se le dijo: “¿Lucháis contra los chiitas cuando los cristianos de Roma ocupan Jerusalén?”. A lo que Saladino contestó: “Mientras tenga a los chiitas a mis espaldas ¿Cómo puede luchar contra los cruzados?”. El EI también señaló estos hechos, concluyendo que Jerusalén no sería liberada hasta que cayeran los ídolos de Al-Naftuia, Al-Sabah (el rey de Kuwait), Al-Nahian (el príncipe de Emiratos Árabes) y los de su tipo.[35]

Uno de los seguidores yemeníes del EI en las redes sociales como respuesta a estas críticas, consideró las críticas como partiendo desde Hamas y de los Hermanos Musulmanes: “Ellos pelean bajo la bandera de la ignorancia, por lo tanto, tanto los asesinos como asesinados en esa guerra se irán al infierno. Como Gaza no rindió obediencia al Estado Islámico es un Estado no-islámico, Hamas un plan de los chiitas o al menos apoyado por los chiitas y mientras Gaza no pacte obediencia al Califa de los musulmanes, apoyarlos está prohibido. Hamas es el principal culpable de que el pueblo musulmán sea masacrado en Gaza.[36]

Posición del EI frente a los “Hermanos Musulmanes”

Al-Adnani, el portavoz del EI de Iraq en uno de sus discursos de nombre “Mis Disculpas Comandante de Al-Qaeda”, critica la postura y el accionar del Líder de Al-Qaeda. Uno de las críticas a Ayman al-Zawahiri, es el apoyo de este último a Mursi en los acontecimientos y al subsecuente golpe de estado militar en Egipto. Al-Adnani pide a Zawahiri que deje de apoyar a Mursi y a su partido (los “Hermanos Musulmanes”), que los abandone.A continuación, considerando a Mursi como habiendo caído en la herejía, acusa al ejército egipcio de haberse dirigido hacia el desierto del Sinaí no para luchar contra los judíos, sino para luchar contra los musulmanes y de haber destruido las casas de los musulmanes con sus tanques y aviones.[37] Después dice: “Este hereje (es decir Mursi) puso un juez cristiano para que juzgue a los cautivos del desierto de Sinaí, para que les declare la pena de muerte. ¿Por qué (Oh Ayman al-Zawahiri) esto no le preocupa, considerándolo un oprimido y acompañándolo?[38]

Los seguidores del EI en aquella circunstancia publicaron mensajes en redes sociales como Facebook y Twitter declarando que en caso de llegar a Egipto, a la primera persona que asesinarían sería a Mursi, debido a que lo consideraban a él y a los “Hermanos Musulmanes” incrédulos, por haber aceptado las “leyes democráticas” y las elecciones, deshonrando a los musulmanes con sus acciones.[39]

La agrupación “Ansar Baytul Muqaddas”, promotores del EI en Egipto, en uno de sus comunicados describen la vida de la gente después del golpe de estado de Sisi, como acompañada de opresión y rebelión. “Con la llegada de Sisi fue derramada la sangre del pueblo y sus casas destruidas, sus bienes saqueados, sin tener compasión ni de ancianos ni de los niños, expandiéndose aun más todas esta violaciones en el desierto del Sinaí, todo esto para asegurar la seguridad de Israel.”[40]

Análisis de las posiciones del EI

Primer Punto; se hace evidente que el EI para justificar sus errores, quiso crear en Iraq y Siria un ambiente de guerra sectaria entre chiitas y sunitas, buscando así exaltar los ánimos de los jóvenes sunitas, ingenuos pero apasionados, de la región y el mundo, atrayéndolos a sus filas y hacia la muerte.

Los líderes del EI se esforzaron, para poder permanecer vigentes, en exagerar algunos de los errores y en acentuar algunas injusticias de los chiitas sobre los sunitas de Iraq.

 Por lo tanto los chiitas no deben caer en su trampa y adentrarse en una guerra sectaria de la cual los únicos verdaderos ganadores serían los estadounidenses y los perdedores tanto los chiitas como los sunitas.

Segundo Punto; A lo largo de toda la historia los chiitas y seguidores de la Casa del Profeta (Ahlul Bayt), por el solo hecho de serlo, fueron siempre y en todos lados oprimidos por los gobernantes; con lo que han aprendido a responder a esta persecución devolviendo amabilidad y resistiendo en la paciencia. Si el Irán islámico busca dar pasos de acercamiento y unidad entre los musulmanes no es por un ardid, ni duplicidad ni cualquier otra cosa, sino que ha aprendido de la familia del Profeta a responder a sus opositores, visitándolos y buscando siempre el diálogo. Participando de los funerales y de los rezos colectivos de los sunitas para que digan: “Este es un ya’farita”,[41] “Esta es la cortesía de un ya’farita”. Por lo tanto el gran presupuesto que se dedica al acercamiento y la unidad entre las diferentes escuelas no es una estratagema, sino que es poner en práctica lo que sus amados antecesores (los imames) les enseñaron y es algo de lo que nunca se van a arrepentir.

Tercer Punto; El Irán islámico considera que debe esforzarse por salvar la vida de los musulmanes a lo largo del mundo y en este trabajo no necesita el permiso ni el apoyo de nadie. Estas son las enseñanzas de la Casa del Profeta, sus antecesores en este camino. El Irán islámico donde sea que escuche el grito de los musulmanes oprimidos, los ayuda sin dudar por un segundo. Hoy día el Irán chiita es el único país que dedica grandes esfuerzos económicos en ayudar a los palestinos, sin esperar algo a cambio.

Cuarto Punto; Los seguidores del EI se han colocado a si mismos el nombre de “yihadistas”, cuando en realidad se han dedicado a combatir a los musulmanes, asesinando a sus hermanos en la religión, mancillando su honor y saqueando sus bienes. Esto nos lleva a preguntarnos: ¿Qué tipo de yihad es este que mientras no combate a los verdaderos idólatras pone a los musulmanes y a los creyentes bajo el terror? ¿Realmente creen que el Profeta (PB) estaría conforme con lo que hacen? ¿Realmente creen que lo que hacen favorece al Islam? ¿No será más bien que se dejan manipular por los enemigos del Islam? Quizás si pensarán un poco abandonarían el camino que hoy día siguen.

Por último; consideramos que los musulmanes chiitas deberían, frente a los Jawariy de esta época, responderles como les respondió el Imam Ali (P) a los de su época: “Si ustedes no se meten con nosotros, nosotros no nos involucraremos en vuestros asuntos. Pero si decidís hacernos la guerra, nosotros les prestaremos batalla. Si, en cambio, decidís luchar contra nuestro enemigo, lucharemos junto a ustedes”. Esta es la misma opinión que tiene el Líder Supremo de la República islámica de Irán acerca del EI, que ha repetido numerosas veces, especialmente en el aniversario del fallecimiento del Imam Jomeini (Dios lo tenga en Su Gloria). Él Dijo: “Ellos (el EI) no son nuestro verdadero enemigo, sino los norteamericanos que están detrás de ellos. Debemos estar atentos de no caer en el juego que ellos nos quieren imponer. No nos desviemos de nuestro camino y no desperdiciemos nuestros esfuerzos en seguirles el juego. Supliquemos por la llegada del Salvador de la Humanidad, el Imam Mahdi (que Dios apresure su llegada)”.