Jabir bin Abdullah Ansari 1er peregrino en Karbala y la tradición de Arbain

Roberto Chambi Calle[1]

Jabir Bin Abdullah Ansari era uno de los antiguos compañeros del Profeta Muhammad (PBD), participó en muchas batallas junto a él y al Imam Ali (p), es considerado el primer peregrino que después de los 40 días visitó al Imam Husein (P) en Karbala, ese día lloró junto a su tumba más aún, pues el conoció a su abuelo y su padre.

Atiya Bin Saad Yanada Aufi, su alumno acompañó a Jabir siendo el segundo peregrino, el mismo que después de la masacre de Karbala siguió con su movimiento de lucha y resistencia frente a la tiranía Omeya, su apoyo a la causa justa de Ahlul Bait se vio reflejada en su participación junto a otros levantamientos importantes como por ejemplo el de Mujtar Ibn Abi Obaid Saqafi en el año 66 de la hégira (685 d.C.)

El legado del Imam Husein hoy está vivo, de acuerdo a cifras oficiales esta peregrinación ha reunido a más de 20 millones[2] de seguidores de un hombre que fue brutalmente asesinado y decapitado por los Omeyas bajo la egida de Yazid hijo de Muawiya en el año 61 AH (680 d.C.) en Karbala, Irak, lugar donde hoy millones de personas aun recuerdan y vivifican este levantamiento contra la tiranía de aquellos individuos que creyéndose “todopoderosos” asesinaron, encarcelaron y despojaron aquellos derechos que Allah  había otorgado a los descendientes de Muhammad (PBD) su último mensajero.

Esta peregrinación iniciada por Jabir bin Abdullah Ansari, ya es una tradición religiosa espiritual conocida como una de las más grandes; pues la visita de salutación que se hace al Imam, así como a los demás mártires se ha instaurado como un patrimonio de todos los hombres y mujeres que se oponen a la tiranía despótica de los gobernantes, una peregrinación que ha salido de las fronteras islámicas para instaurarse en cada rincón del mundo, donde hoy el mensaje del Imam Husein está presente.

Cada año a excepción de la pandemia del coronavirus ha reunido a miles de fieles, así como simpatizantes de esta romería, es tan sorprendente esta visita que han llegado millones de personas de otras latitudes del mundo como por ejemplo de Norte, Centro y Sud América, lugares en donde se creía que el islam y este movimiento eran débiles o inexistentes.

El movimiento huseini ha ingresado a muchas ciudades en Latinoamérica, a tal grado que en la actualidad a miles de kilómetros de karbala, los musulmanes en esta parte del continente se organizan realizando un sinfín de actividades en coordinación con los actos de Arbain, tales como conferencias, muestras de cortometrajes, marchas y ceremonias en torno a los mártires de Karbala.

Los actos por Arbain ya han comenzado, en aras de ello puntualicemos algunos aspectos históricos para su celebración:

Arbain: "Arbain significa “cuarenta” en árabe, es una observancia religiosa shiita, que ocurre 40 días después del día de Ashura, la conmemoración del martirio del nieto del Profeta Muhammad (BPD), el Imam Hussein (P). Por otro lado, si hacemos un pequeño análisis, el número 40 es místico en la teosofía, y de acuerdo al islam, si alguien practica una buena obra constantemente durante 40 días, sería un atributo inseparable y conducirá hacia las bendiciones que descenderá de Dios"[3], asimismo el primer peregrino es Jabir Bin Abdullah Ansari acompañado por Atiya Bin Saad Yanada Aufi. Por otro lado, según otras fuentes los sobrevivientes de esta masacre, ese día volvieron para visitar la tumba del Imam; así como de los demás mártires.

Regreso de los prisioneros a Karbala: Los que estaban apresados (sobrevivientes) por haber participado junto al Imam volvieron ese día para visitarlo, y que según la narración de Seyed Ibn Tavvus, cuando llegaron a Irak pidieron ser llevados a Karbala, momento en el cual observaron que Jabir Ibn Abdullah Ansari junto a Atiya bin Saad Aufi más otras personas realizaban la ceremonia de duelo y llanto.

La Cabeza del Imam es sepultada junto a su cuerpo: Que de acuerdo a los sabios, eruditos e historiadores shiitas como Sheij Saduq, Seyed Morteza, Fatl Neshaburi, Seyed Ibn Tavvus, Sheij Allama Majlisi y otros, la cabeza del nieto del profeta ese día fue enterrada junto a su cuerpo y que por lo mismo se recomendó la peregrinación.

Ser un creyente, así como seguir las enseñanzas de Ahlu Bait, significa también tener presente los actos de sacrificio por el resguardo y la defensa del islam puro enseñado por Muhammad (BPD) y legado a su familia, el cual quiso ser borrado por la dinastía omeya cuando asesinaron al nieto del último mensajero de Dios en Karbala.

Recordar todos estos sucesos mediante la peregrinación o la celebración de actos de luto por aquel martirio es un deber que todo musulmán y todo hombre que busca la justicia en contra de la tiranía en el mundo debe hacerlo.

Actualmente los “Muawiyas” y “Yazids” de esta época aún continúan con esa práctica sinuosa e hipócrita de oprimir a los creyentes, quienes siguiendo el falso islam, escudados en pseudo monarquías “religiosas” bombardean Yemen, ejecutan a sus líderes shiitas  en Bahréin, así como se lavan las manos cuando la entidad sionista asesina y usurpa territorio a los musulmanes  en Palestina, por ello mantener viva la memoria; así como las enseñanzas del señor de los mártires es un deber del verdadero creyente, pues él decía: “Que la gente del mundo sepa que yo no soy un rebelde deseoso de la guerra, que no soy un corrupto ni un desobediente que busca una posición, como tampoco soy un opresor. No tengo tales propósitos. Mi levantamiento es de reforma. Yo me he revelado para reformar la nación de mi abuelo. Yo quiero ordenar lo bueno y prohibir lo malo.” Husain (AS)

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