¿Jesús, Comunista?

«Soy el siervo de Dios. Él me ha dado la Escritura y ha hecho de mí un profeta. Me ha bendecido dondequiera que me encuentre y me ha ordenado la azalá y el azaque mientras viva, y que sea piadoso con mi madre. No me ha hecho violento, desgraciado. La paz sobre mí el día que nací, el día que muera y el día que sea resucitado a la vida». Jesús, Hijo de María (p)[1]

Roberto Chambi Calle[2]

Cada 25 de diciembre, el mundo cristiano celebra el nacimiento de Jesús (p), ese tiempo en la mayoría de los casos es aprovechado para recordar  parte de sus enseñanzas, aquellas que generalmente no son practicadas durante el resto del año, salvo cuando se recuerda “su pasión y muerte” —según la concepción cristiana— poniendo en práctica su ejemplo de vida, que durante meses ha estado en la baulera de sus recuerdos; ya que  hombres y mujeres están más ocupados en su egoísmo y sus finanzas, en una sociedad que ha petrificado los legados de Jesús y sus discípulos a un mundo de materialismo y consumo, cuando el hijo de la Virgen María (p) dijo: “(…)Os he traído un signo que viene de vuestro Señor. ¡Temed, pues, a Dios y obedecedme! Dios es mi Señor y Señor vuestro. ¡Servidle, pues! Esto es una vía recta”. Corán (3:50-51)

Gran parte de la sociedad occidental ha olvidado casi por completo, que uno de los enviados de Dios vino a este mundo para establecer, la igualdad, la justicia, la solidaridad; así como la lucha contra los opresores, pues Jesús en varias de sus parábolas ha denunciado su férrea oposición a las acciones explotadoras de los ricos, manifestando: “Cierto os digo que difícilmente entrará un rico en el reino de los cielos. Mas os digo que es más fácil a un camello pasar por el ojo de una aguja que a un rico entrar en el reino de Dios” (Mateo 19: 23-24), lo cual nos hace entender que el Mesías vino también a luchar y denunciar la tiranía del imperio económico financiero sobre la vida de los “condenados de la tierra.

Las palabras y acciones de Jesús han sido abordados desde diferentes puntos de vista, así por ejemplo para algunos, él era comunista; sin embargo, más allá de los enfoques que se le dan, debemos destacar sus acciones y sus obras debiendo ser éstas las que unifiquen el verdadero sentido de sus enseñanzas.

En ese sentido "El primer comunista del planeta ... fue Jesucristo", dijo Gennady Zyuganov, el líder del partido comunista de Rusia[3],  agregando que el “salvador” era un socialista; pero más allá de la polémica,  Jesús en una de sus parábolas, dijo; “Por sus frutos los conoceréis”(Mateo 7: 15-20), en esa línea, sus acciones nos llevan a entender tal afirmación, por ejemplo la actitud tomada contra los comerciantes cuándo fue a Jerusalén; “halló en el templo a los que vendían bueyes, y ovejas y palomas, y a los cambistas allí sentados”. “Y, haciendo un azote de cuerdas, los echó a todos del templo, con las ovejas y los bueyes; y desparramó las monedas de los cambistas y volcó las mesas. Y dijo a los que vendían las palomas: ¡Quitad esto de aquí y no hagáis de la casa de mi Padre casa de mercado!”. (Juan 2: 14,15,16) demostrando con ello que la adoración a una fuerza superior es más importante que el comercio, el mercado y las finanzas.

Así mismo en el sermón de la montaña, se dirigió a los pobres tal cual se narra en el libro de Mateo: “Bienaventurados los que tienen hambre y sed de justicia, porque ellos serán saciados”, también dijo: “Mas cuando hagas banquete, llama a los pobres, a los mancos, a los cojos y a los ciegos; y serás bienaventurado, porque ellos no te pueden retribuir; pero te será recompensado en la resurrección de los justos. (Lucas: 14:13-14), palabras que nos hacen deducir que Jesús era un hombre —que más allá de su misión espiritual era un revolucionario— cuya lucha estaba en favor de los pobres a diferencia de los fariseos, los mismos que hasta el día de hoy permanecen en las actitudes y costumbres de muchas sociedades materialistas, que solo por estas fechas “navideñas” tienen una pisca de conmiseración y solidaridad con los miserables.

Jesucristo no solo fue la inspiración para los religiosos monásticos, sino también para aquellos que aún no satisfechos con la quietud de las iglesias decidieron llevar a la praxis las enseñanzas del hijo de la Virgen María (p); salir de los templos para luchar y establecer en los hechos y con las armas los derechos de los oprimidos, surgiendo así la teología de la liberación a favor de los desposeídos del mundo.

Figuras —en el caso latinoamericano— como los sacerdotes; Ernesto Cardenal en Nicaragua, Camilo Torres en Colombia o Luis Espinal en Bolivia, eran los referentes de la lucha contra los opresores en favor de los miserables, desde las enseñanzas y parábolas de Jesús; pues Dios quiere al pueblo, no a los imperios ni a la opresión.

Un hito importante de esta lucha en América Latina, es el surgimiento de “Los Sacerdotes del Tercer Mundo” , los cuales al no tener una herramienta propia de confrontación en lo que respecta a la lucha de clases utilizó al marxismo para su confronte y la lucha armada contra el sistema capitalista y neoliberal, peor aun cuando el Papa Juan Pablo II proclamó una encíclica a la economía de mercado[4] como la solución a los problemas del tercer mundo, siendo la “victoria del Neoliberalismo consolidada por Margaret Thacher, Ronald Reagan y el Papa”. (Rubén Dri)

Jesús al igual que otros enviados de Dios, era un hombre revolucionario, un líder nato que se opuso al capitalismo al igual que cualquier líder que —desde el punto de vista de la rebeldía y la insurrección— estaba organizado, cada uno de sus apóstoles era un comandante, por ende en cada región después de los aspectos espirituales se abordaba la construcción de una conciencia social en favor de los desposeídos contra el imperialismo de la época, por ello es que lo perseguían, teniendo por tanto que esconderse y manejarse muchas veces clandestinamente.

En esa línea, Jesús era un antimperialista, siempre a favor de los “condenados de la tierra”, por ello —según el papa Francisco— "Son los comunistas los que piensan como los cristianos. (pues) Cristo ha hablado de una sociedad donde los pobres, los débiles y los excluidos sean quienes decidan. No los demagogos, los barrabás, sino el pueblo, los pobres, que tengan fe en Dios o no; pero son ellos a quienes tenemos que ayudar a obtener la igualdad y la libertad".[5]

Estas enseñanzas impartidas hace más de dos mil años, hoy son tiradas al tacho de la basura; pues ya no importan los pobres ni los oprimidos, sólo el capital, las finanzas, el FMI, el Banco Mundial, los regalos o la suculenta y opípara cena de navidad, cuando la realidad es que miles de niños, mujeres y ancianos sufren hambre, muerte y dolor.

Recordar las verdaderas enseñanzas de Jesús y accionarlas debería ser el verdadero objetivo de la mayoría de las sociedades que hoy están sumidas  en la orgía materialista de consumo, las mismas que  han yuxtapuesto a Dios y sus profetas por la mundanalidad que de forma pírrica y paupérrima, es recordada cuando por una noche sus conciencias despiertan, cuando las mismas debían ser una  constante en sus vidas para seguir al cristo revolucionario, luchador y buscador de la justicia en favor de los pobres y miserables de este mundo.

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[1] Corán, 19:30-31-32-33

[2] Roberto Chambi Calle, Jurista y teólogo, Universidad “Al Mustafá”, Irán, miembro de la Asociación de la Comunidad Islámica “Ahlul Bait” de Bolivia.

[3] “Jesus Christ was world's first COMMUNIST, Russian Marxist leader Zyuganov says, repeating claim holy savior was really a socialist”, Ver https://www.rt.com/russia/533767-zyuganov-jesus-first-communist/

[4] “CARTA ENCÍCLICA CENTESIMUS ANNUS DEL SUMO PONTÍFICE JUAN PABLO II”, en https://www.vatican.va/content/john-paul-ii/es/encyclicals/documents/hf_jp-ii_enc_01051991_centesimus-annus.html

[5] "Los comunistas piensan como los cristianos", Papa Francisco, ver más:  https://www.publico.es/politica/papa-francisco-comunistas-piensan-cristianos.html

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