Palabras del Imam Ĥusaîn Ibn ‘Alî (P) desde Medina hasta Karbalá (4)
Por: Aiatul-lah Muĥammad Ṣâdiq Naӱmî
حَدَّثَنى اَبى اَنَّ رَسُولَ اللّه صلى الله عليه و آلهَ اخْبَرَهُ بِقَتْلِهِ وَقَتْلِى وَاَنَّ تُرْبَتَهُ تَكُونُ بِالْقُرْبِ مِنْ تُرْبَتِى اَتَظُنُّ اَنَّكَ عَلِمْتَ مالَمْ اَعْلَمْهُ؟ وَاللّه لا اُعْطى الدَّنِيَّةَ مِنْ نَفْسى اَبَداً وَلَتَلْقَيَنَّ فاطِمَةُ اَباها شاكِيَةً مالَقِيَتْ ذُرِّيَّتُها مِنْ اُمَّتِهِ وَلا يَدْخُلُ الْجَنَّةَ اَحَدٌ اَذاها فى ذُرِّيَّتها
Haddazanî ꞌabî annâ rasulal-âahi ajbarahu bi qatlihi ûa qatlî. Ua annâ tûrbatahu takûnu bil qurbi min turbatî. Ataḓunnû annaka ‘alimta ma lam a’lamhu? Ual-lâhi la u’ṭî ad-danîata min nafsî ̍abada ûa latalqaîanna Fâṯimatu ꞌabâha, shâkíatan ma laqîat ḏurrîatuha min ꞌummatihi ua la iadjulul-ӱannata aĥadun ꞌaḏâhâ fî ḏurriatihâ”.[1]
Explicación de vocablos:
Turbat, تربت : ‘tierra de la tumba’.
Danîat ûa danâzat, دنیت و دناثت : ‘humillación’ y ‘deshonra’.
Traducción y explicación:
Luego de que se expandiera entre la gente más destacada la noticia de la oposición del Imam al pacto, su decisión de lucha y su partida de Medina, en especial, entre su familia, algunos de ellos- que no tenían conocimiento de la responsabilidad del Imam en virtud de su jerarquía y liderazgo, por un lado y, debido al profundo amor que le tenían, por otro lado, le sugirieron un arreglo con Îaẕîd con la intención de protegerlo.
Una de estas personas fue ‘Umar Aṯrâf, hijo del Príncipe de los creyentes (‘Alî Ibn Abi Ṯâlib, la paz sea con él) quien, según lo transmitido en Luhûf, planteó el tema en presencia de su hermano Ĥusaîn Ibn ‘Alî de la siguiente manera:
“Hermano, mi hermano Ĥasan al Muӱtabâ me transmitió de mi padre, el Príncipe de los creyentes, que te asesinarán y yo creo que tu oposición a Îazîd Ibn Mu’âûîah terminará en tu martirio y este presagio se hará realidad. Pero si juras fidelidad a Îazîd, este peligro se disipará y estarás a salvo de ser asesinado”.
El Imam en respuesta dijo: “Haddazanî ̍abî…”.
Traducción del texto completo:
Mi padre también me ha transmitido a mí que el Enviado de Dios dio la noticia de su martirio y del mío; además mi padre agregó que mi tumba estará cerca de la suya.
¿Acaso piensas que de aquello que tú sabes yo no estoy informado? Pero juro por Dios que no iré bajo el ala de la humillación y, en el día del Juicio Final, Fâṯimah se encontrará con su padre y se quejará ante él de los daños y molestias que sus hijos han sufrido por parte de su comunidad.
Y no entrará al paraíso ninguno de aquellos que hayan molestado a Fâṯimah, debido al mal trato que han tenido para con su descendencia”.
Conclusión: en esta conversación, el Imam Ĥusaîn (la paz sea con él) no sólo habla de su martirio, sino que transmite algunos detalles del mismo según lo había escuchado de su padre ‘Alî (la paz sea con él) quien, a su vez, lo había escuchado del Enviado de Dios. Por ejemplo, la cercanía que habrá entre las tumbas de estos dos grandes Imames.
Respuesta a ꞌUmmu Salâmah
يا اُمّاه وَاَنَا اَعْلَمُ اَنِّى مَقْتُولٌ مَذْبُوحٌ ظُلْماً وَعُدْواناً وَقَدْ شاءَ عَزَّوَجَلَّ اَنْ يَرى حَرَمِى وَرَهْطِى مُشَرَّدينَ وَاَطْفالى مَذْبُوحينَ مَاءْسُورِينَ مُقَيَّدينَ وَهُمْ يَسْتَغِيثُونَ فَلا يَجِدُونَ ناصِراً
Îa ummâh, ua ana a’lamu annî maqtûlun, maḏbûĥun ḏulman ûa ‘uduânan ûa qad shâꞌa ‘Aẕẕa ua Ÿal-la an îarâ ĥaramî ûa rahṯî musharradîn, ua aṯf’âlî maḏbuĥîn, maꞌsûrîn, muqaîîadîn, ua hum iastaġîzûna, fala iaӱidûna nâṣiran…[2]
Explicación de vocablos:
Ĥaram, : حَرَم‘se denomina así a la esposa e hijos’.
Rahṯ, رَهْطِ :‘se utiliza para referirse a los ‘familiares’ y ‘parientes’, (excepto al cónyuge).
Musharrad, مُشَرَّد : (es objeto y participio), ‘disperso’, ‘despatriado’, ‘desamparado’.
Ma'sûrîn, مَاءْسُورِينَ: (pl. de maꞌsûr que deriva de asîra), ‘prisioneros’.
Muqaîîadîn, مُقَيَّدينَ: participio pl. derivado de la raíz qaîada, ‘encadenados’.
Îastaġîzûn يَسْتَغِيثُونَ : de la raíz isteġâzah, ‘buscan ayuda’.
Traducción y explicación:
Según lo transmitido por Ravandí y Bahrandí y otros transmisores de hadices, cuando ꞌUmmu Salâmah, esposa del Enviado de Dios (la paz y bendición sean con él y su descendencia), se enteró de la marcha del Imam Ĥusaîn (la paz sea con él), ella lo visitó y le rogó: “la taĥẕanî bi juruyika ila ‘Irâq…” (“No me entristezcas con tu viaje hacia Irak, pues he escuchado de tu abuelo, el Enviado de Dios (la paz sea con él y su descendencia) que dijo: “Mi hijo Ĥusaîn será martirizado en la tierra de Irak en una zona llamada Karbalá”). El Imam le respondió: “Ia ummâh, ua ana a’lamu annî maqtulûn, maḏbûĥun ḏulman…”
Traducción del texto completo:
Oh, madre (no pienses que solo tú has sido informada de esto), sé que ciertamente seré martirizado y degollado injustamente. Dios, Grandioso y Esplendoroso, ha establecido que mi familia y mis allegados fuesen despatriados y mis hijos decapitados, prisioneros y encadenados; pedirán ayuda y no encontrarán socorredor alguno.
Conocimiento del Imam respecto a futuros eventos
Queda claro- a través de las respuestas del Imam a ‘Umar Aṯrâf y a Ummu Salâmah, y además, por sus otras palabras pronunciadas en diferentes ocasiones -más adelante transmitiremos- que aquella eminencia tenía conocimientos respecto a todos los infortunios que surgirían en esta marcha: la prisión de su familia, el lugar de su propia tumba y otros detalles.
Nosotros no argumentamos que esta información del Imam se deba a su conocimiento dada su jerarquía- que es un tema de debate teológico- sino que, además, tenía un conocimiento adquirido a través de otras vías, por ejemplo, las palabras de su padre o su abuelo. También algunas esposas del Profeta y algunos de sus discípulos tenían conocimiento respecto al tema. El líder de este movimiento y revolución islámica, conscientemente, había aceptado todos los infortunios, con el fin de alcanzar el objetivo y cumplir con su responsabilidad divina, la salvación del Islam y el Corán; en aras de luchar contra toda opresión e injusticia.
Como hemos señalado, la palabra del Imam con ꞌUmmu Salâmah –con poca diferencia- se ha transmitido en algunos libros de hadices y de historia[3].
Es probable que en todos estos libros se haya transmitido este dicho desde una sola fuente, susceptible de ser refutada. Nosotros, por nuestra parte, tampoco insistimos en afirmar completamente esta transmisión. Sin embargo, no documentamos el conocimiento del Imam respecto al futuro sólo en este relato, ya que el contenido de decenas de narraciones shî’as[4] y sunnas[5], de los profetas anteriores y del Profeta del Islam, así como también por parte del príncipe de los creyentes, se refieren al trágico e histórico suceso de ‘Âshurâꞌ. Estas otras fuentes hacen innecesario que nos basemos en este ĥadîz para argumentar el conocimiento del Imam y si lo mencionamos en este libro es porque estamos reuniendo sus palabras.
No obstante, nos asombra de sobremanera que uno de los autores, para negarlo, se haya ocupado con tanto ahínco en poner en duda la veracidad de la palabra del Imam hacia ꞌUmmu Salâmah. Pero ¿cómo puede responder a tantos otros, y por qué fue indiferente frente a tantos relatos? Éste es un tema que no lo sé.
En las páginas venideras nos ocuparemos del modo en que el Imam, conociendo su martirio en el camino de Dios, inició su viaje, así como también echaremos luz acerca del significado de la frase, “Ciertamente que Dios quiere verme martirizado y …”.
يا اَخِى لَوْلَمْ يَكُنْ فِى الدُّنْيا مَلْجَاء وَلا مَاءْوىً لَما بايَعْتُ يَزيد بْنَ مُعاوِيَةَ ...
يا اَخِى جَزاكَ اللّه خَيْراً لَقَدْ نَصَحْتَ وَاَشَرْتَ بِالصَّوابِ وَاَنَا عازِمٌ عَلَى الْخُرُوجِ اِلى مَكَّةَ
وَقَدْ تَهَيَّاءْتُ لِذلِكَ اَنَا وَاِخْوَتى وَبَنُو اَخى وَشِيْعَتِى وَاَمْرُهُمْ اَمْرى وَرَاءيُهُمْ رَاءْيى
وَاَمَّا اَنْتَ فَلا عَلَيْكَ اَنْ تُقِيمَ بِالْمَدِينَة فَتَكُونُ لى عَيْناً عَلَيْهِمْ لا تُخْفى عَنِّى شَيْئاً مِنْ اُمُورِهِمْ
لا ذَعَرْتُ السَّوامَ فى فَلَقِ الصُّبح
مُغيراً وَلا دُعِيتُ يَزيدا
يَوْمَ اُعْطى مَخافَةَ اَلمُوتِ كَفاً
وَالْمَنايا يَرْصُدْنَنى اَنْ اَحيدا.
Îa ꞌajî, lau lam iakun fid-dunia malӱâꞌun ûa la maꞌuân lamâ baia’tu Îazîda bna Mu’âûîata…ia ꞌajî,- ӱaẕâkal-lahu jairan- laqad naṣaĥta ûa ꞌasharta biṣauâbi ûa ꞌanâ ‘âẕimun ‘alâl jurûÿi ̍ila Makkata ûa qad taĥaîîaꞌtu liḏâlîka ꞌanâ ua ꞌijuatî ua banu ꞌajî ûa shî’atî ûa ꞌamruhum ꞌamrî ûa raꞌiuhum raꞌî ûa ꞌamma anta falâ ‘alaika an tuqîma bil madinati fatakûna li ‘ainan’alaihim la tujfî (la tujf) ‘annî shaiꞌan min ꞌumûrihim.[6]
La ḏa’artu ssauâma fi faalqi ṣubĥi
Muġîran ûa la du’îtu Îazîdâ
Iauma ꞌu’ṯî majâfatal mauti kaffân
Ûal manâiâ iarṣudnanî an aĥidâ[7]
Traducción y explicación:
Entre quienes demostraron tener temor por la decisión del Imam, se encontraba Muĥammad Ĥanafîah, uno de los hijos del Príncipe de los creyentes, Imam ‘Alî (la paz sea con él), que según lo transmitido por Ṯabarî y otros historiadores visitó al Imam Ĥusaîn (la paz sea con él) y le dijo:
¡Hermano! Tú eres entre todos, el más amado y el más querido para mí y yo tengo la responsabilidad de decirte lo que considero que es beneficioso para ti. Y creo que, por ahora, no debes instalarte en ningún lugar en forma permanente, sino que tú y tus hijos deben permanecer lejos de Îazîd y de esta ciudad y, desde allí, envía representantes hacia la gente y atrae su apoyo. De modo que, si te juran fidelidad, alabas a Dios y si juran a otro, no recibes ningún o. Pero si entras en una de estas ciudades temo que ello produzca discrepancia entre la gente y que un grupo te apoye y otro se levante contra ti; y que todo termine en una masacre en la que tú recibas alguna aflicción y en ese momento es que la sangre de la mejor gente de esta comunidad será derramada vanamente y su familia será humillada.
El Imam dijo: “Según tu opinión, ¿a qué ciudad sería mejor que me dirija?”. Muĥammad Ĥanafîah dijo: “En mi opinión, te diría que entres en la ciudad de la Meca y si no encuentras seguridad allí, marcha de una ciudad a otra por la vía del desierto para ver mejor la situación de la gente y su futuro. Espero que el camino correcto quede frente a tus pies ya que tienes un profundo conocimiento e ideas correctas y puedes resolver los problemas uno tras otro con previsión y precaución”. El Imam respondió: “ꞌAjî, lau lam iakun fid dunia malӱâꞌun ûa la maꞌûâ”.
Traducción del texto completo:
Hermano, tú que me propones marchar de una ciudad a otra para abstenerme o alejarme de jurar fidelidad a Îazîd, debes saber que, si en el mundo entero no quedase ningún refugio ni amparo para mí, jamás juraría fidelidad a Îazîd Ibn Mu’âûîah.
En ese momento las lágrimas comenzaron a caer sobre el rostro de Muĥammad Ĥanafîah, entonces el Imam continuó:
Hermano, que Dios te recompense grandemente, ciertamente que mostraste tu buena intención para conmigo, y me señalaste la vía correcta, pero yo (sé bien cuál es mi responsabilidad) he decidido marcharme hacia Meca y, junto a mis hermanos, sobrinos y un grupo de mis seguidores, estamos preparados para partir, pues sus asuntos son mis asuntos y sus decisiones son mis decisiones, pero en cuanto a ti, no debes marchar con nosotros. Tu responsabilidad es quedarte en Medina, y ser mis ojos entre ellos [los enemigos] durante mi ausencia, debes controlar todos los movimientos de los Omeyas y ponerme al tanto de lo que sucede.
El Imam, luego de su conversación con Muĥammad Ĥanafîah, se dirigió a la mezquita y al santuario del Profeta (la paz sea con él y su descendencia) una vez más. En el camino recitaba constantemente las prosas que Îazîd Ibn Mufarreġ había escrito, expresando su entereza y dignidad, a pesar de las amenazas y peligros:
Yo no temo a los pastores en el momento del alba,
Ni temo que me ataquen en medio de la noche
Dejaría de llamarme Îazîd Ibn Mufarreġ
Si les doy la mano de la humillación por temor a la muerte
Alejándome de los peligros que surjan ante mí.
ꞌAbu Sa’îd Miqbarî dijo: “Cuando escuché esos versos de boca del Imam, me di cuenta por su contenido, que esta eminencia está pensando en un objetivo elevado y un proyecto grandioso”.[8]
Conclusión: El Imam (la paz sea con él) con este diálogo que mantuvo con Muĥammad Ĥanafîah y con la recitación del poema de Îazîd Ibn Mufarreġ, explicó el motivo de su levantamiento, es decir, su oposición a Îazîd. Su decisión fuerte muestra que, si en toda la extensión de la Tierra no hubiese ningún lugar de refugio y amparo para él, jamás se sometería a jurarle fidelidad a Îazîd, resistiría con firmeza frente a cada peligro, para alcanzar su objetivo.
Este era el objetivo del Imam y su pensamiento interno que lo expresó en su diálogo y en la poesía.[9]
Extraído del libro: Palabras del Imam Ĥusaîn Ibn ‘Alî (P) Desde Medina hasta Karbalá
Editorial Elhame Shargh
Derechos reservados. Se permite copiar citando la fuente
Fundación Cultural Oriente www.islamoreinte.com
[1] ṮÂÛÛṢ, R., Luhûf, p. 23.
[2] RAVANDÎ, Quṯbud dîn Sa’îd Ibn ‘Abdul-lâh, Jarâiÿ, p. 26; BAĤRÂNÎ, Saîîd Hâshim, Madînatul Ma’âÿiẕ, p. 244.
[3] RAVANDÎ, Quṯbud dîn Sa’îd Ibn ‘Abdul-lâh, Jarâiÿ, p. 26; BAĤRÂNÎ, Saîîd Hâshim, Madînatul Ma’âÿiẕ, p. 244; MAS’UDÎ, ‘Âli îbn Ĥusaîn, Izbâtul Ûaṣîah, p. 162; MAŸLESÎ, Al-lâmah, Biĥarul anuâr, t. 44, p. 331.
[4] Sólo el difunto Maӱlesî, en su libro Biĥarul anuâr, t. 44 relata setenta y un ĥâdîz al respecto.
[5] Sólo el difunto ‘Al-lâmah ꞌAminí, en su valioso libro Ṣirâṯunâ ua sunnatunâ relató unos veinte hadices confiables, a partir de fuentes sunnas y ha desarrollado extensamente acerca de los transmisores de esos dichos y el grado de su credibilidad.
[6] BAĤARÂNI, ‘A., ‘Aûâlimul…, “Maqtal ‘aûâlem”, p.54; JÛÂRIẔMÎ, M., Maqtal, t. I, p. 188.
[7] ṮABARÎ, Muĥammad Ibn Ÿarîr, Târîj, “Ĥaûâdeze Sâl 61”; IBN AZÎR, ‘Îẕẕu-ddîn, Kâmel fî târîj, t. III, p. 265; MUFÎD, Sheij, Irshâd, p. 202.
[8] ṮABARÎ, Muĥammad Ibn Ÿarîr, Târîj, “Ĥaûâdeze Sâl 61” (Sucesos del año 61); IBN AZÎR, ‘Îẕẕu-ddîn, Kâmel fî târîj, t. III, p. 265. Según Ibn Abil Ĥadîd en la explicación de Nahÿul Balâġah, t. I, p. 375 que cita estos versos de Îazîd Ibn Mufarreġ que el Imam Ĥusaîn (la paz sea con él) solía repetir.
[9] Esta expresión del Imam nos hace acordar las palabras del gran líder de la Revolución Islámica Aiatul-lâh Jomeini (Dios tenga misericordia de él), quien continuó los objetivos del Imam Ĥusaîn (la paz sea con él), cuando por parte del régimen baasista de Irak tuvo que abandonar este país y en un comunicado histórico dijo: “Si ningún gobierno me permite residir en su país, yo subiré a un barco y en medio de las bravas olas de los mares, haré llegar a los oídos del mundo mi voz, que es la voz de los musulmanes oprimidos.”