Palabras del Imam Ĥusaîn Ibn ‘Alî (P) desde Medina hasta Karbalá (9)

Por: Aiatul-lah Muĥammad âdiq Naӱ

Carta a Muslim Ibn ‘Aqîl

اَمّا بَعْدُ: فَقَدْ خَشيتُ اَنْ لا يَكُونَ حَمْلُكَ عَلَى الْكِتابِ اِلَىَّ فِى اْلاسْتِعْفاءِ مِنَ الوَجْهِ الَّذى وَجَّهْتُكَ لَهُ اِلاّ الْجُبْنَ فَامْضِ بِوَجْهِكَ الَّذى وَجَّهْتُكَ فِيهِ وَالسَّلامُ

Ammâ ba’d, fa qad jashîtu  ̍an la îakûna ĥamalaka ‘alal kitâbi ꞌilaîîa fil-ꞌisti’fâꞌi minal ûaӱhil-laḋî ûaӱӱahtuka lahu  ̍il-lal-ӱubna, famḋi bi uaӱhikal-laḏî ûaӱӱahtuka fîhi. Ûa-ssalam.[1]

Explicación de vocablos:

Ĥamalahu, حَمْل[u1]  : ‘motivó’.

Ûaӱh,  وَجْهِ: ‘dirección’, ‘rumbo’, uaӱӱahahu  ̍ilâ fulân: ‘lo envió hacia alguien’.

Traducción y explicación:

Muslim Ibn ‘Aqîl, en la mitad del mes de Ramadán, marchó hacia Kufa desde la Meca, siguiendo la orden del Imam Ĥusaîn Ibn ‘Alî (la paz sea con él).

En su camino, entró a Medina y, en una parada breve, visitó la tumba del Profeta (la paz sea con él), visitó también a sus parientes y junto a dos guías de la tribu de Qeîs siguió su viaje hacia Kufa.

Estos viajeros, cuando se distanciaron un poco de Medina, perdieron el camino y quedaron desorientados en medio de un desierto extenso y arenoso.

Luego de mucho esfuerzo, encontraron el camino cuando ya los acompañantes de Muslim, a raíz del intenso calor y sed, perdieron sus vidas. No obstante, Muslim Ibn ‘Aqîl logró llegar a una zona llamada Maḋîq que era la morada de una tribu nómade y así salvar su vida.

Muslim Ibn ‘Aqîl, luego de llegar a Maḋîq envía una carta al Imam a través de una persona de aquella tribu. En la misma, mientras contaba el suceso de la muerte de los acompañantes y su propia salvación, le pidió que reviera el tema de su envío a Kufa y que, si era conveniente, envíe a otra persona en su lugar para esa misión, ya que tomó lo sucedido como un mal augurio y piensa que este viaje no será bendito.

Muslim, al final de la carta, agregó que esperaría en el mismo lugar la respuesta a la carta, de la mano del mismo emisario.[2]

El Imam Ĥusaîn (la paz sea con él), en respuesta a la carta escribió: “Faqad jashîtu an…”

Traducción del texto completo:

Temo que tu motivación al escribir esta carta, tu renuncia y tus disculpas, no sean más que temor, pero deja de lado el temor y cumple con la misión que te he encomendado. Ûas-salam.

Temor al temor

A partir de estas palabras fortalecedoras del Imam, deducimos que un líder, con la personalidad de la talla de Ĥusaîn Ibn ‘Alî (la paz sea con él) –que desea crear en la sociedad una profunda revolución y cambio-, no sólo él no debe tener temor, sino que sus acompañantes y auxiliares también deben gozar de tal valentía. De lo contrario, su revolución se enfrentaría con el fracaso no pudiendo alcanzar aquel objetivo exaltado.

Sí, el temor del Imam no se debe a la cantidad de sus enemigos ni a sus escasos recursos, sino que su temor se debe a una posible debilidad que pueda surgir en su representante y emisario.

Extraído del libro: Palabras del Imam Ĥusaîn Ibn ‘Alî (P) Desde Medina hasta Karbalá

Editorial Elhame Shargh

Derechos reservados. Se permite copiar citando la fuente

Fundación Cultural Oriente  www.islamoreinte.com


[1] ṮABARÎ, M., Târij, “Ĥaûâdeze Sâl 61”; Irshâd Mufîd, p. 204, JÛÂRIẔMÎ, M., Maqtal, t. I, p. 196.

[2]ṮABARÎ, M., Târîj, “Ĥaûâdeze Sâl 61”.


 [u1]لطفا میم و لام مفتوح باشند.

Article_image
Article_rate
Average: 1 (1 vote)