Nigeria ha sido escenario de centenares de asesinatos cometidos contra la comunidad chiita de este país africano. Muertes que a pesar de su crueldad y grado de violencia no han generado esas reacciones tan propias del mundo occidental, que sale a las calles para proclamar el amor por la vida, siempre y cuando esa vida sea occidental. Je Suis Chiita no es parte del sentir de los gobiernos de Francia, Inglaterra, estados unidos o aquellos que se conmovieron por los ataques en Paris el pasado mes de noviembre atribuido a Daesh, mostrando que para algunos existen muertes de primera y segunda categoría.Los asesinatos de la comunidad chiita en Nigeria a manos del Ejército y el grupo terrorista takfirí Boko Haram deben ser condenados sin distinción alguna, no hacerlo así y separar las muertes porque ocurren en Europa o en África es seguir perpetuando el  colonialismo mental y el servilismo de aquellos que sacan a relucir su Je Suis Paris y dejan enterrados los lamentos por el pueblo sirio, palestino, libio, saharaui o en este caso la comunidad chiita de Nigeria No vale más un francés que un palestino o un yemení, no vale más un muerto parisino que uno de Zaria en el norte nigeriano y sin embargo el colonialismo y servilismo nos sigue dominando.
El grado de cubrirse en cada doctrina y sociedad, depende de muchas cosas tales como la manera de mirar del hombre, la familia, el rango de aceptación de la participación social de la mujer, la mutua influencia de ambos sexos, etc.En la religión islámica el asunto de cubrirse tiene la misma norma que en esta doctrina que ha admitido cierto ultra-material y madurez para los seres humanos, hombre y mujer, porque el hombre no es la única criatura que debe esforzarse por asegurar sus necesidades requeridas en la vida, pero hay otros campos de la vida mucho más amplios y profundos, que la vida misma, que pueden ser detectadas.
En el día Ashura, el 10 del mes de Muharram del año 680 d.C., en las cálidas arenas del desierto de Karbala, en Irak, Husain (P) y 72 miembros de su familia, amigos y seguidores, incluido un hijo de 6 meses, fueron martirizados bajo las más horripilantes circunstancias a manos del ejército de Yazid, (el segundo califa Omeya).Millones de musulmanes de diferentes países llegan cada año a la ciudad santa iraquí de Karbala para conmemorar el día de Arbain, ceremonia religiosa que marca la culminación de un período de cuarenta días de luto tras el aniversario del martirio de Imam Husain, nieto del Profeta Muhammad (PB) y el tercer Imam chií.En 2015 se calcula que entre 20 y 25 millones de peregrinos se harán presentes en la ciudad santa de Karbala, [Iraq], para participar en las ceremonias del Arbain, en torno al santuario del Imam Husain y los sitios históricos que fueron bañados por la sangre de los mártires de Karbala.
En un período histórico donde el Islam sufre ataques de diversos frentes, destacando en ello una enorme campaña comunicacional, que intenta desvirtuar la esencia de esta milenaria e influyente cultura, el líder religioso Iraní Ayatolá Seyed Alí Jamenei dio a conocer una carta, la segunda en este año 2015 dirigida a la juventud del mundo occidental. Una carta de suma importancia publicada en un momento oportuno y con una profunda percepción de la realidad actual.El objetivo central de esta misiva, surgida en el marco de un Oriente Medio convulso tras las agresiones terroristas contra Siria e Irak, como también atentados terroristas que han causado víctimas en Beirut, Bangkok, Mogadiscio, Ciudad de Kuwait, Túnez, Ankara, Maiduguri, Paris, Susa, uniendo en el dolor a millones de ciudadanos de países tan diversos como El Líbano, Túnez, Tailandia, Nigeria, Mali, Francia, Dinamarca  y en forma crónica en los territorios palestinos ocupados por la entidad sionista, que sufre el terrorismo hace ya 70 años.
Los amargos acontecimientos que provocaron el terrorismo ciego en Francia, una vez más, me han motivado a dialogar con vosotros los jóvenes. Para mí resulta lamentable que tales acontecimientos generen estas intervenciones, no obstante, es una realidad que si estos asuntos dolorosos no preparan el terreno para encontrar una solución y un motivo para que nos pongamos a pensar juntos, los daños serían mayores...Cualquier persona que sepa de amor y humanidad, se siente consternada por tales escenas, sea en Francia, Palestina, Irak, Líbano o Siria. Seguramente, los mil millones y medio de musulmanes del mundo comparten este sentimiento y repudian a los artífices y perpetradores de tales tragedias.
Antes de la llegada del Islam las sociedades tomaban dos posturas con respecto a las mujeres. Algunas sociedades las consideraban animales domésticos. En ellas, las mujeres no eran vistas como miembros de la sociedad; a las mujeres se les explotaba para beneficio de la sociedad (los hombres). En sociedades más civilizadas, las mujeres eran ciudadanos de segunda clase, comparables a los menores de edad y a los esclavos. En estas sociedades, las mujeres gozaban de unos pocos derechos que eran controlados estrictamente por los hombres.Pero el Islam, por primera vez en la historia de la humanidad, reconoció a la mujer su plenitud de derechos en la sociedad, valorando sus obras en forma igual a la de los hombres...
En este tiempo en donde el islam y la comunidad islámica es vilipendiada interna y externamente, se hace urgente analizar las cuestiones periféricas de la fractura o la división que se le quiere asignar; pues muchos “Islamólogos” y “Orientalistas” se han dado el lujo de poder lanzar análisis y críticas fuera de la cosmovisión islámica, los pocos, con los conocimientos de lengua y cultura y los muchos, conocedores del tema solo por el aparataje mediático por el cual han sido aculturizados y dogmatizados, aquel que de manera intencionada trata de destruir el mundo islámico, aquella frase de “divide y vencerás” nuevamente toma vigor en un mundo en el que solo importan la noticias sinuosas que venden y tan solo dan su enfoque sedando y acallando a aquellos medios y analistas musulmanes, los cuales debido a su disparidad con los “islamólogos” y “analistas” en boga tienen las de perder a la hora de demostrar una verdad contra la falsedad.
Si bien en América Latina por no decir Abya Yala el islam está creciendo; es decir cada vez aumenta la cantidad de personas que se convierten o abrazan la religión como ya lo afirmamos anteriormente en un texto y que por la importancia del tema actualizamos los datos para el presente artículo, también es cierto que continúa el desconocimiento sobre esta religión de Paz y Armonía, si es así entonces ¿Cuáles son los principales retos y desafíos que como musulmanes debemos plantearnos a la hora de llevar adelante la verdadera difusión del islam?, sobre todo en este continente que cuenta con una magnánima riqueza cultural identitaria, una gran cosmovisión andina; pero también con una idiosincrasia peculiar en la gente de los pueblos, aquella que fue impuesta y que continúa vigente después de más de 500 años de genocidio europeo, caso específico el Estado Plurinacional de Bolivia.
El 12 de Octubre de 1492, fecha que es celebrada con gran júbilo por muchos españoles y personas que desconocen el verdadero significado de su existencia, mal llamado día de la hispanidad o como el día de la raza, o el día de la fiesta nacional de España; etc…Pero lo que muchos de ellos desconocen o quieren hacerlo, al margen de su uso manipulado que el estado español le ha dado, es que esta fecha simboliza el inicio de la explotación y miseria de todo el Continente Americano; es decir de toda Abya Yala, a través del saqueo y devastación europea, imponiendo incluso sus ideas devastadoras, su religión y toda su maraña nefasta de maniobras, porque la etnicidad de la pobreza que hoy perdura no sólo es un hecho evidente, sino que además refleja una tendencia que ya había señalado el mismo Carlos Marx: “La ideas de los dominadores son las ideas dominantes”, o dicho en otros términos, la clase que ejerce el poder material dominante en la sociedad es al mismo tiempo, su poder espiritual dominante.
El wahabismo que se confunde en el seno saudí con una práctica política y religiosa, es una doctrina intolerante con todas aquellas creencias, que no se subordinen a su visión del mundo y su interpretación del Corán. Un credo que señala como incompatible cualquier otra filosofía religiosa, que sea contraria a la interpretación salafista y que es considerada por el Wahabismo como una anatema.Esta visión de mundo, que hunde sus raíces en el siglo XVIII cuando el jeque Muhammad ibn Saud convirtió en ley fundamental de su dominio el catecismo de una secta fundamentalista sunní creada por Muhamad Ibn al Wahab - el Wahabismo - doctrina religiosa que encontrará en la Casa al Saud y su Monarquía el catalizador para tratar de expandir su ideología en el conjunto de la Umma.