EN EL NOMBRE DE DIOS EL COMPASIVO, EL MISERICORDIOSO
Ramadán, la brisa de la Misericordia divina
“Oh gente por cierto que ha venido entre vosotros el mes de Dios con bendiciones, misericordia y perdón. Este es un tiempo que ante Dios es el mejor de los meses, sus días los mejores y sus horas las mejores. Es un mes en el que fuisteis invocado por la invitación de Dios y en él os habéis vuelto de entre la gente que ha sido objeto de la generosidad de Dios. Vuestra respiración en él es glorificación, vuestro sueño en él es adoración, vuestras acciones en él son aceptadas y vuestras súplicas en él respondidas…” (Partes del sermón del Profeta, la paz sea con él y su descendencia respecto al mes de Ramadán).
Algunas recomendaciones llegadas de los Imames de Ahlul-Bait (la paz sea con ellos) y los grandes sabios para sus discípulos especiales, con el fin de profundizar la calidad del ayuno y nuestra adoración en el sagrado mes de Ramadán (Cabe destacar que lo siguiente es un complemento para lo que hemos ofrecido anteriormente en el libro Las llaves del Paraíso en cuanto a la práctica en el mes de Ramadán):
Como sabemos los Ahlul–Bait (la paz sea con ellos) son los barcos de la salvación de los seres humanos como dijo nuestro Profeta (la paz sea con él y su descendencia): “El ejemplo de mi familia es el ejemplo del Arca de Noé, quien suba a ella se salvará y quien se atrase se ahogará”. El mes de Ramadán según las palabras de nuestros sabios es una de las anclas y oportunidades en donde la gente puede subir, entonces tratemos de aprovechar todos sus segundos, a través de una programación concreta en este bendito mes.
*Tratar de leer el Corán cuanto podamos y tratar de tener una lectura con atención en sus traducciones y tener en cuenta a Ahlul Bait que son los ejemplos claros del Corán, puesto que el mes de Ramadán es la primavera del Corán según las narraciones. Este sagrado mes es el tiempo en el que los libros sagrados fueron revelados. En el sexto día de este mes fue revelada la Tora, en el duodécimo día fue revelada la Biblia y en la noche del decreto fue revelado el Corán, como el último y más perfecto de los libros celestiales.
*Uno de los actos con mucha recompensa de este mes es decir salawat (saludar al Profeta y su descendencia con las siguientes palabras: “Allahuma salli ala mohmamadim ua ali Muhammad wa ayyil fara yahum”. El Salawat tiene un asombroso efecto en el mundo de la creación y la existencia, puesto que a través de nuestras salutaciones la marcha de la verdad hacia su lugar merecido se acelera y cuanto más salawat se hace la concreción de la verdad perfecta se acercará más (la aparición del Imam Mahdi (la paz sea con él) es el momento en el que la verdad se manifiesta con todo su esencia).
*Tratar de no ser unidimensional sino esforzarse por ser multidimensional. Tratar de realizar todos los buenos actos juntos y no conformarse con algunos. Tratar de ser un buen siervo de Dios, de ser un buen hermano y servidor para el prójimo y tratar de tener en cuenta nuestras propias almas, auto purificarnos, auto realizarnos y saber que los buenos actos aunque nos parezcan pocos, son una gran ayuda para el Imam oculto y apresuran su llegada.
*Ya que el mes de Ramadán es el mes de purificación y auto realización debemos cuidarnos día y noche, cuidar nuestros pensamientos, nuestros dichos y nuestra conducta en general.
*Debemos tener una vigilancia permanente: de nuestros ojos, nuestros oídos y nuestros corazones. Nuestra boca tiene que estar en ayuno de las palabras que no complacen a Dios, nuestros oídos deben estar en ayuno de escuchar sonidos y palabras que no desea Dios, nuestros ojos tiene que estar en ayuno de ver escenas que prohíbe Dios y por fin nuestros corazones tienen que estar cerrados frente a todo lo que no es Dios.
*El mes de Ramadán es la mejor oportunidad para salir de la cárcel de nuestros bajos pensamientos, nuestros amargos recuerdos, de nuestros rencores y envidias. Este tiempo es el mejor para alejarnos de los recuerdos inadecuados y preocupaciones que ocuparon nuestra mente, que no nos dejan pensar, que no nos dejan adorar, que nos privan de sentir el placer de hablar con Dios. Tratemos de remplazarlos con buenos recuerdos, con el recuerdo de Dios, de Ahlul Bait (la paz sea con ellos), y de todos los buenos siervos de Dios, para sentirnos siervos enamorados de Él.
*Esforzarse por realizar en este mes largas prosternaciones, puesto que la misma es el estado más cercano a Dios, durante ellas pedir perdón a Dios por, para los demás y también pedir a Él para que acerque la hora de la victoria final de los creyentes a través de la venida de nuestro Imam oculto.
*El más bello momento del día y de la noche es la madrugada, no debemos estar desatentos en estos momentos tan elevados. Los mejores estados espirituales en la aproximación a Dios se encuentran en ellas. Los grandes sabios y místicos confiesan que todos los grados que obtuvieron se debieron a sus confidencias con Dios en las madrugadas. Se recomienda leer el Corán y también las súplicas durante las mismas aunque fuesen unos minutos.
*Tratar de tener durante las madrugadas dos partes o en otras palabras dos mesas: en una donde nos servimos bebidas y comidas que por sí mismas tienen mucha recompensa y también tener otra en la que nos elevamos espiritualmente y nutrimos nuestra alma a través de la meditación en la creación de Dios, recitación del Corán y súplicas.
*Durante las madrugadas apenas nos levantemos aunque fuese por unos segundos debemos ir bajo el cielo a saludar al Profeta y los Imames (la paz sea con ellos) en especial al Imam Husain y al Imam Mahdi con las siguientes palabras: "As salamu alaikum ya ahlabaitin-nubuuat. As salamu alaika ya aba abdillahilhusain. As salamu alaika ya baquiiatallah. La paz sea con vosotros oh gente de la casa de la profecía. La paz sea contigo oh Aba abdillahilhusain. La paz sea contigo oh resto de Dios en la tierra”.
*Comenzar el desayuno con la súplica de Faray (súplica del alivio que comienza con: Allahuma con lewalliieka…) y pedir a Dios la pronta aparición del Imam Mahdi (la paz sea con él).
*Durante todas las noches especialmente en el momento del desayuno apenas vemos el agua recordar la sed del Imam Husain y su familia en el día de Ashura y luego de tomarla saludar al Imam Husain y los mártires de Karbalá (la paz sea con ellos).
*En todas las noches de este mes pedir perdón a Dios por nosotros y para todos los creyentes a lo largo del mundo, con las palabras que el Imam Rida nos enseñó, (la paz sea con él):
اللهم اغفر لمن فی مشارق الارض و مغاربها
”Allahumma gfir liman fi mashariqil ardi ua magaribiha: Dios mío perdona a todos los que están en los orientes de la tierra y en los occidentes”.
*Durante el mes de Ramadán no olvidarse del estado de los pobres, tratar de proveerles la comida y lo que necesitan en este mes, puesto que según un dicho de Ahlu-Bait (la paz sea con ellos):
“Así como la fuerza del cuerpo está en la comida, la fuerza del espíritu está en ofrecer a los demás la comida”.
*Uno de los buenos actos de este mes es elevar nuestro conocimiento en torno al Islam y Ahlul-Bait (la paz sea con ellos) .Debemos dedicar parte de nuestro tiempo a la lectura del Corán con meditación, lectura de súplicas teniendo en cuenta su contenido, y lectura de libros islámicos.
*Durante todo el mes tratar de alejarnos de palabras vanas tanto en el día como en la noche. Especialmente durante las noches, cuando estamos en compañía de nuestra familia o en las mezquitas y centros, estando con nuestros hermanos musulmanes, las mejores palabras son en torno de Dios, de sus profetas y de Ahlul-Bait (la paz sea con ellos) y realizar súplicas colectivas. Existe un hadiz de nuestros Imames que dice: “Si dos creyentes se sientan y hablan de nosotros la tercera de ellos es un ángel que suplica por ellos y pide a Dios que los perdone.” Imaginen cuanto sería la recompensa y las bendiciones cuando un grupo de los creyentes, dentro de las casas de Dios (mezquitas) lo recuerda a Él y a sus seres queridos.
*En los momentos de Iftar (momento de romper el ayuno) y cuando estamos sedientos y hambrientos, sentados en la mesa servida de Dios, aprovechando de la gracia que Él nos brinda, debemos tener en cuenta y meditar que si Dios nos está dando estas mercedes es porque en el universo existe un ser humano perfecto que adora a Dios como Él lo merece, y que ese ser es el Imam oculto, el salvador esperado, el mismo que Dios por su valor sustenta a los demás y así sabremos que estamos sentados sobre la mesa del Imam oculto y todo lo que nos llega es a través de Él. Esta es una verdad que nos enseñan las súplicas:
الذی بیمنه رزق الوری و بوجوده ثبتت الارض والسماء
“Alladi bi iumnehi ruziqal wara ua biwuyudehi zabatatil ardi uasasamaa, quien por la bendición de su ser Dios les dio sustento al resto de sus criaturas y por valor de su existencia Dios mantiene la tierra y los cielos”. Luego de esta reflexión pedir a Dios que nos haga aparecer cuanto más rápido al dueño de estos meses, para que podamos llegar a lo que decimos en la súplica de Nodbah en las mañanas de los días viernes: “Atarana nahuffu bika ua anta taummul mala…ua nahnu nagulo alhamdulillahi rabbila alamín Oh Imam oculto cuando llegará el momento en que nosotros felices te acompañemos, mientras tú nos diriges y digamos todos juntos:
الحمد لله رب العالمین
“allhamdulilah rabbil aalamin, las alabanzas pertenecen a Dios el Señor del universo”.
Recopilado por la Prof. Zohre Rabbani en colaboración con la Lic. Sdenka Saavedra, Redacción de Kauzar, Sección de Mujeres
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