Los intérpretes e investigadores mantienen diferentes opiniones en cuanto al número de los nombres del Corán. Abû Al Futûh Râzî en su libro de exégesis coránica ha mencionado cuarenta y tres nombres para el Corán. Zarkishî narra de Qâdî Abul Mu‘alî, conocido como “Shîdzlah”, que ha encontrado cincuenta y cinco nombres para el Corán; y algunos otros han hecho llegar el número de los nombres del Corán hasta ochenta. La mayoría de los títulos que estos personajes han registrado respecto a los nombres del Corán han sido utilizados dentro del Corán como adjetivos del mismo, no como nombres de éste.
Algunos opinan que la estructuración de los versículos  del Corán en capítulos, así como el ordenamiento de los capítulos, fueron especificados por el mismo Profeta (PB), siguiendo una inspiración divina.Sin embargo, existen indicios y pruebas que demuestran que las copias recopiladas durante las épocas de Abu Bakr y de Outhmán como, por ejemplo, las de Ubai Ibn Ká´ab y Abdullah Ibn Mas´úd, tenían discrepancias entre sí en lo que al orden de los capítulos se refiere. Se deduce que este ordenamiento de los capítulos fue con base en  opiniones particulares de cada compañero recopilador o en las opiniones de Outhmán, en el caso de sus copias unificadas, ya que si el Profeta (PB) había estipulado un orden específico de los capítulos, ninguna persona podría, posteriormente  alterar ese orden. Suyúti –sabio sunnita- dice: “La totalidad de los sabios están convencidos del hecho de que el ordenamiento de los capítulos fue por criterio propio de investigación y deducción”.
Es importante recalcar que cuando los  Shi´as usan el término “Imamato” o “Imam”, abarca todas las cuatro dimensiones de la wilayat. No excluye ni a la autoridad espiritual ni universal, ni la social, ni política. En este sentido, el termino  Shi´a “Imamato” o “Imam” es más amplio que el termino Sunnita “khilafat” o “califa”. En los libros que tratan sobre el debate  Shi´a-Sunni del liderazgo después del Profeta, el enfoque es más sobre el liderazgo socio-político pero no con el fin de negar la autoridad espiritual y universal del Imam. Por lo tanto al leer o discutir el tema de la sucesión del Profeta Muhammad (BPD), uno no debe perder el significado universal del estatus de un Imam desde el punto de vista  Shi´a.
Para referirnos al periodo de la escritura del Corán luego del fallecimiento del Profeta (BP), comenzaremos hablando de la preocupación y esfuerzos al respecto por parte de una personalidad como Imâm ‘Alî (P), que fue pionero en todas las escenas y fue quien desde el comienzo de la revelación asumió en forma continua la escritura de la revelación acompañando al Profeta en todos los momentos. Él fue elegido para recopilar el Corán por parte del Mensajero de Dios en los últimos días de su bendita vida.Ambas escuelas islámicas sostienen que la primera persona que se dedicó a la recopilación del Mus·haf luego del fallecimiento del Profeta (BP) y según lo ordenado por él, fue Imam ‘Alî (P).El Mus·haf de ‘Alî (P) poseía unos privilegios tales como: El orden de las suras era de acuerdo al orden de la revelación, en él se encontraban las causas y el lugar del descenso, así como los aspectos generales de las aleyas.Este ejemplar ha permanecido como un legado en manos de los Imâmes (P) y ha sido transmitido de un Imâm a otro.
La doctrina islámica, que mejor que ninguna otra garantiza y protege la felicidad humana en la vida, se presenta a los musulmanes a través del Sagrado Corán. Las cuestiones religiosas del Islam, que consisten en una serie de creencias y leyes morales y prácticas, tienen su origen en el Libro revelado. Dios Altísimo dice en el Corán :“Ciertamente esteCoránguía hacia lo más justo (recto)”. (17:9)
Esta sura, fue revelada luego de la Sura Ad-Duhâ, afirmando su contenido en esta versión, dado que una vez más se mencionan en ella las mercedes de Dios otorgadas al Profeta (PB). Ambas exponen tres grandes mercedes; las primeras son tanto materiales como espirituales y las de esta sura son sólo espirituales. En su totalidad, este capítulo gira alrededor de tres ejes:1. Las tres gracias divinas.2. La albricia al Profeta (PB), de que en un futuro se eliminarían los obstáculos que perturbaban su convocatoria.3. El sometimiento a un único Dios y el estímulo a la adoración y el ruego.Este artículo da continuidad la exégesis del Sagrado Corán.
La Shî‘ah Imamita, en lo relacio­nado a la doctrina y los principios del Islam, actúa según los hadices narrados del Mensajero de Dios (BP) a tra­vés de narradores fiables en los que es posible basarse, ya sea que estas narraciones y hadi­ces se encuentren en libros shiítas o sunnitas.Por ello, puede suceder que la Shî‘ah en sus libros de jurispru­dencia también se base en narra­ciones transmitidas a través de narradores sunnitas. Este tipo de hadîz, que es clasificado en cuatro clases, es denominado “muazzaq” (fiable).En base a esto, las acusacio­nes que algunos tendenciosos hacen contra la Shî‘ah Imamita a este respecto, no tienen base y son absolutamente erróneas.El Fiqh Imamita se basa -fundamentalmente- en el Sagrado Co­rán, la Tradición, el intelecto y el con­senso de los sabios.
Vimos cómo luego del fallecimiento del Noble Profeta (BP) fue realizada la recopilación del Corán formalmente bajo la orden del primer Califa y el esfuerzo de Zaîd Ibn Zâbit. Anterior a esto, ya había sido recopilado un ejemplar por Imâm ‘Alî (P) quien era el más versado del Corán. Igualmente algunos de los grandes discípulos se preocuparon también por recopilar su propio Mus·haf, y los ejemplares de algunos de ellos, que gozaban de una destacada posición, sin demora atrajeron la atención de los musulmanes. Fue así como la gente de cada región recitaba el ejemplar recopilado por uno de los discípulos.
En toda sociedad muchas veces se perpetran asesinatos. Frente a estos casos una religión completa y abarcadora como lo es el Islam, debe presentar un plan y programa justo y lógico para poder prevenir e impedir la repetición y perpetración de tales crímenes. La implementación de la Ley de Talión, junto a otras leyes, acabó con las guerras fraticidas que se perpretaban antes de la llegada del Islam implantado claros limites de justicia en una sociedad previamente sumida en la ignorancia...
El tema es uno de los más polémicos de la historia del Corán, que ha dividido a los expertos y conocedores de esta ciencia en dos grupos: Un grupo que opina que la recopilación del Corán –con la misma ordenación actual- fue realizada durante la vida del Enviado de Dios (BP); y el segundo que remonta la recopilación oficial del Corán en forma de un volumen (entre dos tapas) a la época del primer Califa, luego del fallecimiento del Profeta (BP).Antes de introducirnos en este tema es importante destacar un punto, que al no haber sido tomado en cuenta, colocó a muchos de los grandes sabios enfrentados entre sí. En verdad lo que ha provocado esa profunda escisión entre esas dos hipótesis es la falta de atención al punto preciso de las discrepancias y desacuerdos. Si el punto de la discrepancia fuese determinado con exactitud, la diferencia entre las dos hipótesis disminuiría.