La blasfemia occidental contra el Corán y la Civilización Islámica

Sdenka Saavedra Alfaro[1]

En un mundo en donde el odio, la intolerancia, la discriminación continúa acrecentándose, en donde la islamofobia se esconde detrás de la libertad de expresión y la democracia, utilizadas como pretexto para incitar a la violencia, mostrando una vez más la mentalidad inquisidora y el doble rasero de los países europeos, tal es el caso de Suecia y Dinamarca al permitir la repetida blasfemia y  profanación al Corán, hechos que han suscitado la ola de repudio y condenas a nivel mundial, no sólo en países islámicos sino también en aquellos que no lo son.

Sin lugar a dudas, nos encontramos con los programas y planes del lobby sionista, apoyados por EEUU, y sus aliados, que luchan contra el islam, promoviendo el temor hacia esta forma de vida, pues en Occidente se permiten insultos a Dios, a sus libros, así como a sus profetas; pero se prohíbe exponer los crímenes de lesa humanidad que lleva adelante el régimen de Israel tachando a quién lo haga como antisemita.

Estos actos de odio, lo hemos visto no sólo en la escritura de libros contra el Islam y el Corán como el texto de Salman Rushdie, “Los versos satánicos”, sino también en la filmación de cientos de películas, luego de los atentados del 11 de septiembre de 2001; ya que el control de Hollywood y del poder de los medios de comunicación se encuentran en sus manos[2], así como se han proliferado caricaturas satíricas como las del  semanario  “Charlie Hebdo”, así como también se repiten estos actos de quema del Sagrado Corán, una violación a los derechos religiosos y sociales, hechos contundentes de islamofobia, discriminación y de aversión al islam.

El 27 de junio de 2023, se suscitó el primer hecho de blasfemia al Sagrado Corán cuando Salman Momika de ciudadanía iraquí que vive en Suecia, quemó páginas del Corán frente a una mezquita de Estocolmo, escoltado de la policía, acto que llevó a países como Yemen, Irán, Irak, Turquía, Arabia Saudí, Jordania, Egipto, el Líbano entre otros, así como a organizaciones de derechos humanos a repudiar la repetida profanación al Corán.

Sin embargo, el jueves 20 de julio de 2023, después de recibir los permisos necesarios de la policía sueca, Momika volvió a profanar el libro sagrado de los musulmanes, por lo que también provocó la condena de las autoridades y países islámicos y no islámicos, considerando el respaldo del gobierno de Suecia a la profanación del Corán como una postura de guerra contra el mundo islámico.

Al mismo tiempo, el 24 de julio de 2023, dos miembros del grupo ultraextremista Danske Patrioter (Patriotas Daneses, en español), prendieron fuego en Dinamarca a una copia del sagrado Corán frente a la embajada de Irak.

En otro episodio contra los musulmanes, el 25 de julio de 2023, cinco miembros del mismo grupo “Patriotas Daneses”, han quemado copias del Corán frente a la representación diplomática de Egipto en Copenhague. Blasfemias que han desatado una ola de repudio y condenas a nivel mundial.

Estos actos de sacrilegio demuestran que Estados Unidos, Israel, la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN), y sus aliados desde el 2001 empezaron una guerra contra el mundo islámico asociándolo a la barbarie, al terrorismo y a todo lo que provenga de Oriente Medio, justificando su presencia militar, en países a los que saquearon, asesinaron y destrozaron como a Irak, Afganistán o Paquistán.

Además de ello existen interrogantes, pues si bien se condena de forma correcta las expresiones de racismo y de antisemitismo, ¿Por qué no se lo hace con las expresiones de Islamofobia?, recordando que la Organización de las Naciones Unidas (ONU), ha proclamado el 18 de junio de 2023 como el día internacional para contrarrestar los discursos de odio, sin embargo, hasta ahora no se ven resultados para que termine la arremetida estos actos de discriminación. La misma institución el 12 de julio de 2023, aprobó una resolución contra la profanación del Corán, la que fue aprobada por 28 países a favor, 12 en contra donde se encontraban EEUU, Israel, Suecia, Dinamarca entre otros, los mismos que llevan una guerra contra el islam, y 7 abstenciones.

Lo cierto es que el complot de Estados Unidos e Israel frente al crecimiento del islam en el mundo, siendo un rebrote del fascismo occidental, debe terminar; pues frente a los acontecimientos suscitados, en las ciudades de los territorios ocupados palestinos por Israel las que fueran escenario de protestas masivas tras la votación sobre el plan de reforma judicial del premier, Benjamín Netanyahu, aprobado el lunes 24 de julio de 2023, ve el descontento de la población Israelí, los que fueron  golpeados con machetes, por los soldados en caballo de su propio ejército, así como con cañones con agua, reportándose al presente de estas líneas al menos 19 arrestos y cinco heridos.

Muchos analistas, así como también el ex primer ministro de Israel Ehut Olmert, manifestaron que el régimen de Israel avanza hacia una guerra civil debido a la extrema brecha social creada por la polémica reforma judicial, la que busca restringir las facultades de la corte suprema. Así también el presidente del régimen sionista, Isaac Herzog, confirmó el pasado 23 de abril que Israel se enfrenta a su crisis interna más peligrosa desde su creación en 1948.

Al mismo tiempo el Seyed Hasan Nasralá, secretario del Movimiento de Resistencia Islámica de El Líbano (Hezbolá), señaló que Israel vive sus peores días y se dirige al declive, después que los diarios israelíes rechazaron la reforma judicial con portada en negro, el martes 25 de julio de 2023.

Igualmente, para muchos escritores el punto más cuestionable del proyecto de ley, es que podría evitar que el primer ministro sea suspendido, a pesar de que enfrente un juicio por fraude, soborno y abuso de confianza. Pero también vemos que Netanyahu a quien recientemente le han implantado un marcapasos en el corazón, se encuentra en la cuerda floja y se siente intimidado; pues millones de sus compatriotas quieren su expulsión incondicional e inmediata.

Todo este odio y la islamofobia existente coincide con el mes de Muharram, y con su décimo día Ashura, cuando el Imam Husein (P), el nieto del Profeta del Islam, Muhammad (P), fue martirizado junto con los miembros de su familia y compañeros en las llanuras desérticas de Karbala en 680 d.C. siendo ellos 72, enfrentándose a 30.000, un levantamiento y filosofía de coraje que enseña a las personas cómo luchar contra la injusticia y enfrentar todo tipo de tiranía; hoy a más de 14 siglos de la batalla de Karbala, nuevamente la resistencia recobra fuerzas para derrotar a toda la tiranía de la hegemonía mundial, y es la respuesta a toda esta blasfemia.

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