Desde el 25 de marzo de 2015 la comunidad internacional ha sido testigo de las múltiples atrocidades cometidas por la monarquía saudita quien en confabulación con otros países de manera directa es la culpable de las masacres que se están suscitando en este momento en Yemen, ciudades y más que todo la población civil son los testigos de la injerencia bélica y del ataque desmedido del país árabe hacia la población yemení. La mayoría de los medios internacionales proclives a los países que quieren doblegar y dominar la zona hasta la fecha y como de costumbre en la mayoría de sus informes, solo muestran retazos de sus verdades que quieren informar.
En una mayoría de los países del mundo la navidad ya comenzó con diversas actividades como los desfiles llevados a cabo en diversas ciudades mostrando inmensas caravanas de comparsas y carros alegóricos, con la participación de empresas e instituciones que muestran sus diversos productos para venderlos como todos los años en estas fechas festivas y haciendo obviamente una celebración consumista, cuando en el fondo debería ser una alegoría de crecimiento espiritual y de entrega hacia los más necesitados; pues en estas fechas nació el Profeta Jesús(P).
Las agresiones contra Siria, Irak, Yemen y Libia, fundamentalmente, se han convertido en parte de los frentes más importantes de lo que es ya una realidad: la Tercera Guerra Mundial.Una Guerra de alcance planetario, que además presenta otras áreas de conflictos, como es el caso de la región del Donbaas, que soporta una guerra de acciones militares y permanente tensión política y social desde abril del año 2014 principalmente en las regiones de Luganks y el Donetsk, autoproclamadas como Repúblicas Populares. Ello, tras los hechos que desencadenaron el derrocamiento del ex Presidente Ucraniano Viktor Yanukovich en febrero del año 2014, a manos de los movimientos proeuropeistas e influenciado también por la decisión de los habitantes de la Península de Crimea de volver al seno de Rusia, uno de los factores esgrimidos, para sancionar a la Federación Rusa.
En estos días en que el gran líder cubano ha dejado este mundo se ha desatado un mar de tinta y comentarios acerca de su trascendente personalidad. No he podido ni he querido sustraerme a pensar en este hombre extraordinario que conmueve a gran parte del mundo. Tiene cosas buenas que enseñar a la humanidad y tiene carencias a mi juicio importantes que es necesario no perder de vista a la hora de elogiar sus logros.
Sin duda, Fidel ha sido el hombre que ha cambiado algunos de los paradigmas políticos a partir de sus principios contra el imperialismo y que no solo lo ha enarbolado, sino que la ha puesto en acción cuando en enero de 1959, junto a sus compañeros derrocan al ilegítimo régimen de Fulgencio Batista, aquel que era el satélite y sirviente de la administración norteamericana y que no solo fue la toma física del poder sino la liberación de aquellos hombres que pedían igualdad y justicia social. Los axiomas revolucionaron se pragmatizaron en la creación de un estado Comunista con una identidad propia: la de los cubanos donde hay una mezcolanza de razas y que más allá de ello la igualdad en casi todas las esferas: más allá del color de su piel o su estatus social.
El santo Profeta (BP) conocía las actividades que se desarrollaban fuera de su casa y cuyo propósito era apoderarse del califato. Para prevenir este desvío decidió consolidar la orden de sucesión en el Príncipe de los creyentes y su descendencia dejando un documento escrito. Por lo tanto, un día que los discípulos lo visitaron meditó un rato y luego les dijo: “Proporciónenme pluma y papel a fin de escribir algo por lo cual jamás se desviarán”. En ese instante Umar, que sería luego el segundo califa, rompió el silencio de la reunión diciendo: “El Profeta se ha agravado, el Corán está frente a nosotros y nos es suficiente”.
Los aportes del Islam son un luminoso capítulo en la historia de la humanidad, no solo por la grandeza de los musulmanes al crear una cultura universal, sino por lograr un grupo de victorias que les ayudó en su momento a constituir un nuevo mundo más allá del Oriente y del Occidente; el gran territorio del Islam.
Donald Trump, el mandatario electo de los Estados Unidos tiene entre sus “objetivos” internos como también en el ámbito de su política exterior el tensionar la relación con los musulmanes a quienes considera como personas que “odian a Estados Unidos” ¿Cómo evitar esta conducta que según Trump los musulmanes sienten contra Estados unidos? Las medidas parecen ser simples en el razonamiento blanco y negro que mueve al magnate devenido presidente: estrechamiento de la vigilancia de la comunidad musulmana en Estados Unidos – que se calcula en cerca de 7 millones de habitantes – como también el restringir la entrada de creyentes de esta confesión religiosa, declarado en plena campaña presidencial. Esto, a propósito de la matanza de San Bernardino en California – en diciembre del año 2015 - donde los atacantes dieron muerte a 14 personas supuestamente bajo la inspiración de la doctrina takfirí propagada por EIIL – Daesh en árabe – que se sumó a los atentados de París en Noviembre del año 2015, que permitió al otrora candidato Donald Trump afirmar que “debemos bloquear completa y totalmente la entrada de musulmanes en Estados Unidos porque son personas que odian a la población de nuestro país en actos más allá de lo comprensible y que se instaure hasta que las autoridades averigüen qué está pasando”.
“El hombre es esclavo del mundo y solamente palpa la religión con la lengua, mientras considera que estas palabras superficiales no perjudican su vida mundanal, entonces gira en dirección a la religión, pero cuando es experimentado en la prueba, son pocos los que realmente siguen la verdadera religión”. (Imam Hussein)
La ocupación vivida por el pueblo palestino desde el año 1948 hasta la fecha, representa una espina clavada en la conciencia de los pueblos del mundo, la constatación de la hipocresía y la doble moral de instituciones como la Organización de las Naciones Unidas – ONU - y el desprecio al derecho internacional por parte de la entidad sionista.