Estábamos en las alturas de Anar, el cielo se había despejado por completo. El enfermero vendó la herida de Ibrahim, y empezamos a dividir las tropas mientras hablábamos por el transceptor de radio. De repente, uno de los chicos vino corriendo y me dijo: — ¡Señor! ¡Señor! Un grupo de iraquíes con las manos entrelazadas detrás de la cabeza en señal de rendición se dirige hacia acá. — ¿Dónde? — Le pregunté sorprendido y después nos fuimos hacia una trinchera que estaba frente a la colina. Eran casi veinte personas en la colina de enfrente, mostraban un pañuelo blanco. Les dije a los combatientes que se preparasen, que podía ser una trampa. Momentos después, dieciocho iraquíes —entre ellos un oficial y un comandante— se rendían ante nosotros. Me alegré mucho porque además del triunfo de nuestra operación, llevaríamos prisioneros.
En su totalidad, este capítulo trata el tema de la Resurrección y los sucesos previos a ella. Esto, a través de categóricas y conmovedoras expresiones y de una amonestación y advertencia claras.Por último, divide a los hombres en dos grupos: aquel cuyos actos pesarán en la balanza de la justicia divina, cuya recompensa será la vida placentera y eterna junto a la misericordia y aquel, cuyos actos serán livianos y su destino será el ardiente fuego infernal. Para conocer el mérito de su lectura, nos es suficiente exponer el siguiente hadîz del Imam Al-Bâqer (P): “A quien recite Al-Qâri‘ah, Dios Altísimo  lo protegerá de la sedición del “Daÿÿâl”, (impostor que se levantará al final de los tiempos para engañar a la gente y alejarla de la fe en Dios) y del infierno el Día de la Resurrección, Inshâ’al·lâh.”
Considerado esencialmente como el maestro espiritual invisible,  reservado a aquellos que son llamados a una afiliación directa al mundo divino sin intermediario ninguno, como lo fue Ibn ‘Arab, el profeta Jidr despierta siempre la curiosidad por las historias fascinantes que le rodea. Aparece como el guía de Moisés, su iniciador «en la ciencia de la predestinación». Se revela así como depositario de una ciencia divina infusa, superior a la ley (shari’a).Este artículo del gran islamólogo H.Corbin nos introduce en los arcanos de este profeta .
El matrimonio en el islam es sagrado, es un acto benevolente. Cuando un hombre y una mujer están a punto de cometer pecados es cuando deben tomar la firme decisión de casarse. Ahora ¿Cómo elegimos a nuestra pareja?, al respecto el islam recomienda a hombres y mujeres que se debe estudiar y analizar a la futura pareja, por ejemplo si viene de una familia religiosa, tiene valores morales, es creyente; etc…, para luego contraer matrimonio. Pero si después de esa “investigación” de su entorno, nos damos cuenta que es de una familia que bebe alcohol, usa drogas y no tiene moral, el islam nos recomienda que debemos alejarnos de esta decisión, por ende no casarnos.
Es un placer para mí poder acompañarlos aquí, en esta Facultad de Humanidades y poder invitar a ustedes para dialogar juntos, especialmente acerca de un tema tan importante como lo es el ser humano. Acerca de Irán ustedes habrán escuchado muchas cosas, pero desgraciadamente, como la gran mayoría de las cosas que se saben y se escuchan a través de los medios de comunicación, por lo general, tienden a tergiversar mucho de la información, así que es una muy buena oportunidad para poder hablar de estos temas directamente. Bueno, una de las intenciones que tenemos nosotros en este tipo de encuentros y diálogos, es para que de alguna manera podamos conocernos mutuamente. En este caso hay un tema importante que va a ser el eje de nuestra conversación, acerca del pensamiento teórico de la revolución islámica, que seguramente pudiendo unir objetivos en común entre Medio Oriente y América Latina, tendrá sus efectos a nivel mundial. Y uno de los temas fundamentales que es un eje en el pensamiento revolucionario, tiene que ver con los derechos humanos. Cuando hablamos de derechos humanos, no hablamos sólo de la dimensión de derechos sino también de las obligaciones y las responsabilidades del hombre y lo más importante es cuál es el referente y el criterio que debemos tomar en cuenta para hablar de los derechos humanos...
Uno de los muchos logros de la Revolución Islámica de Irán; instaurada la República Islámica es el respeto por las minorías religiosas, a quienes desde hace 42 años se las protegen y se las respetan, siendo los seguidores de estas creencias respetados por todas las autoridades de la nación persa, siendo una muestra contundente de ello las visitas del Jefe de Estado, el Ayatolá Jamenei a sus domicilios, este respeto y esta convivencia armónica obedece también a los axiomas cristalizados en la Constitución Iraní cuando señala que: “Las minorías religiosas reconocidas gozan de libertad con la condición de que no vulneren los principios de la independencia, de la libertad, de la unidad nacional y los preceptos islámicos, así como los fundamentos de la República Islámica. A nadie se puede impedir ser miembro de alguna, del mismo modo que tampoco se puede obligar a nadie que se afilie o se asocie a cualquiera de ellas”. (art.26)
El mundo ha tenido y siempre tendrá, mientras exista, una trayectoria especial y un cierto orden que lo conducen por su camino de perfección hacia el fin determinado. Sin embargo, el tiempo que se asume para la vida cósmica no es preciso ya que el tiempo es algo continuo, inherente al movimiento. Por lo tanto, todo movimiento tiene su propio tiempo distinto. El tiempo convencional con el que estamos familiarizados los humanos se mide por la duración del día y la noche y como ésta es una unidad evidente para todos, entonces medimos con respecto a ella nuestros eventos particulares...El cambio y la evolución en los constituyentes del mundo es obvio e innegable. De ahí que el Corán diga: “No hemos creado los cielos y la tierra y lo que entre ambos hay, sino con la verdad y por un tiempo determinado....”
La mayoría de los medios de comunicación en occidente, haciendo uso de su postura intolerante e islamófoba han mostrado a la mujer musulmana como esclava y sometida a los hombres, siendo que estas aseveraciones son totalmente demagógicas y fuera de la verdad; pues el vestir prendas distintas a la cultura occidental o tener comportamientos enmarcados en su fe, no significa que ellas sean inferiores a la cultura occidental, ya que para las mujeres musulmanas la vestimenta o el manto islámico es una obligación religiosa, la misma que si no es comprendida desde las dimensiones espirituales difícilmente será entendida.
‘Abdul Razzaq Nawfil, investigador contemporáneo egipcio, en el libro «El Milagro numérico del Corán», se ocupó en investigar las maravillas del Corán en lo relacionado al orden numérico. El Profesor ‘Abdul Razzaq escribe respecto a su propio libro: «De entre los favores de Dios Altísimo hacia mí está que mientras escribía el libro «El Islam, religión y vida mundana», me guió para que me diera cuenta que el término Dunia –vida mundana- en el Corán ha sido repetido en el Corán igual de veces que fue repetido el término Ajirah –el más allá-. Además cuando preparaba el libro «El mundo de los genios y los ángeles» me indicó que la expresión Malâ’ik -ángeles- se repitió igual número de veces en el Corán que Shaiâtin -demonios- y yo mencioné estas conclusiones en los dos libros mencionados. En esos momentos yo no sabía que esta armonía abarcaba a todo lo que el Corán mencionaba. Desde entonces, cualquier investigación que hacía en el Corán, llegaba a una conclusión maravillosa, ya sea que los temas de investigación fuesen semejantes o contrapuestos, ¡y eso es un milagro! Es una imagen de las diferentes imágenes de los milagros. Es algo superior a la fuerza humana y más elevado que los límites del intelecto del hombre y me pareció que aquello a lo que Dios me orientó debería ser propagado y divulgado para hacer conocer a la gente este nuevo aspecto del milagro coránico».
Los enemigos externos e internos de un tiempo a esta parte se han dado a la tarea de atacar a los iraníes, cuando paradójicamente quedan en silencio cuando Arabia Saudita ejecuta a musulmanes shiitas por emitir opiniones en contra la monarquía Al Saúd.

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