Fumar Narguile equivale a fumar treinta cigarrillos

¿Y tú ya lo probaste?

Sdenka Saavedra Alfaro[1]

Shisha[2], Narguile[3], Cachimba o Hookah, estas especies de pipas de agua que se utilizan para fumar tabaco con sabor a frutas o plantas sin nicotina, es la nueva tendencia o moda que está creciendo en todo el mundo actualmente; sobre todo en Latinoamérica, de la mano del éxito de la telenovela turca “Las mil y una noches”[4].

“El canal chileno Mega fue el primer país hispanohablante en emitir la serie y tal fue su ranking, que otros países de la región ha comprado la serie para ser emitida en sus respectivos países como: Argentina, Colombia, Ecuador, México, Puerto Rico, Uruguay, Paraguay, Perú y Brasil”.[5]

Sin embargo, pese a su rotundo éxito por su exotismo y demás clamor que emite, vemos que los efectos negativos de esta novela no tardaron en llegar; pues no sólo se ve su influencia nociva para los adolescentes y la juventud en general, por adquirir la moda de fumar Narguile o Shisha; sino que también se trata de una propaganda de Turquía en contra la conmemoración del genocidio Armenio[6]; así lo manifiesta Liliana Karagumechian[7]

Debemos recordar que el 24 de abril de este año, se cumplieron 100 años del genocidio o también llamado holocausto contra los Armenios, perpetrado por el gobierno de los Jóvenes Turcos, en el imperio Otomano, en el cual entre un millón y medio y dos millones de personas fueron masacradas, torturadas y asesinadas; entre ellas mujeres y niños.

“Las Mil y una Noches es una ficción que se produjo en 2006, por eso es llamativo que la novela se emita justo en este año 2015, cuando se conmemoraron el “Genocidio Armenio”, y sobre todo en países como Argentina y Uruguay, los que reconocieron este hecho como un crimen de lesa humanidad”.[8]

“Como hijos, nietos y bisnietos de sobrevivientes del Genocidio, queremos que todos conozcan la historia de este holocausto y que los productores que trajeron esta novela, sepan que la misma está causando mucho dolor a toda la comunidad Armenia en Latinoamérica”.[9]

Como estamos comprobando son más los efectos negativos para nuestros niños, adolescentes y la juventud que esta telenovela está produciendo; ya que como señalamos detrás de esta moda de fumar Shisha o Narguile, se esconde además un peligro para la salud, sobre la cual la Organización Mundial de la Salud (OMS), viene trabajando hace algunos años; pues es comparable al que generan los cigarrillos regulares, o incluso mayor.

“Una sesión de Narguile puede durar de 30 minutos a una hora, eso equivale a fumar entre veinte y treinta cigarrillos; es decir que el daño para la salud es muy importante, no sólo porque cualquier producto que contenga tabaco es nocivo, independientemente del tipo y la cantidad; sino también porque por más apariencia de inocuidad que se le quiera dar, el tabaco en hojas tiene infinidad de químicos y tóxicos”.[10]

Por otro lado, el Programa Nacional del Control de Tabaco del Ministerio de Salud de España, advierte:

“Fumando Narguile durante una hora se producen entre cinco y diez veces más aspiraciones de humo y toxinas en comparación con el cigarrillo, con lo cual no hay nada de cierto en esa supuesta “purificación” de los tóxicos que genera el agua”.[11]

También, el Dr. Khalid Anis, Presidente de TAG en Manchester, al respecto nos argumenta:

“Hay una idea errónea de que fumar Shisha o Narguile no es tan malo como los cigarrillos; ya que el tabaco es con sabor y pasa a través del agua primero, pero los agentes cancerígenos y la nicotina se encuentran todavía allí, así que fumar regularmente shisha provoca los mismos problemas de salud similares a los que enfrenta los fumadores de cigarrillos, ya sea respiratoria, o enfermedades del corazón o cáncer; al igual que con cualquier otro producto de tabaco, y también los fumadores regulares de shisha están mucho más proclives a su adicción, hasta el punto de que puede lo necesitan todos los días”.[12]

Estamos viendo que el tabaco de Narguile o Hookah, llamado “molasses”, que es un tipo de tabaco especial para fumar en estas pipas de agua, que no tiene nada que ver con el de los cigarrillos, puros, ya que se compone de hojas de tabaco bastante finas, lavadas muchas veces y mezcladas con miel o similares, además de los adictivos para conseguir que tengan algún sabor de frutas o plantas, tiene los mismos riesgos o incluso muchos más que produce fumar cigarrillos corrientes en la salud, porque tiene una infinidad de tóxicos y químicos que producen cáncer.

Y lo peor de todo es que esta tendencia de fumar pipas de agua, que tiene su origen en Oriente, porque tanto en el Líbano como en Turquía su uso es una tradición muy antigua; ya que suele ser un objeto de uso familiar en el que todos los miembros se sientan juntos para hablar mientras fuman, está creciendo en América Latina, incluso se abrieron cafés donde acuden jóvenes y adolescentes para hacer uso de los mismos.

Pues; la cultura de los bares o cafés de Shisha que primero llegó a Europa, luego a Estados Unidos ahora invade Latinoamérica, en Argentina, Buenos Aires, se armaron circuitos informales de bares en los barrios de Palermo y San Telmo; así como también en Chile, Colombia, Uruguay, Venezuela[13]; en los cuales, los adolescentes y adultos jóvenes en la mayoría de los casos, asisten; ya que son atraídos debido a los diferentes sabores de tabaco que se pueden elegir (menta, manzana, plátano, frutilla, chocolate, entre otros), lo que atrae a los consumidores. Además, suele ser un elemento que favorece la convivialidad, y porque se encuentran fascinados y encantados  de probarlo y así descubrir lo que se siente; ya que lo presenciaron en la telenovela turca “Las Mil y una Noches”.

Suena redundante, pero es muy importante que se debe filtrar el uso de los medios de comunicación, con respecto al uso correcto que se le debe dar; es decir prestar atención de qué programas, telenovelas y demás programación ven nuestros hijos (as), porque lo que cuenta es la calidad en este caso particular el de la televisión, sea por cable, internet o por otro medio, su poder de persuasión es muy poderoso ya que tiene una gran influencia, sobre ellos (as). Y a este respecto la educación para el consumo crítico y adecuado de la televisión debe iniciarse en la familia.

Porque al poner límites en la calidad de programación que vean nuestros hijos, o al seleccionar los programas emitidos en la TV, o al limitar la utilización del internet para fines educativos por ejemplo, estaremos luchando contra este tipo de influencia nociva que está dejando esta novela u otras, esta propuesta  como ya lo dijimos anteriormente, está dirigida al cambio social, al rescate de valores, al querer cambiar la manera de pensar, de ver la vida, a creer en Dios sobre todas las cosas, a replantearnos quiénes somos, para qué estamos en este mundo, y a poner en práctica todas esas indicaciones, normas, leyes, para descubrir la paz, y poner luz a nuestro camino, el Islam es un renacer.

Además que ser capaces de utilizar las bondades de estos medios para implementar programación televisiva basada en contenidos morales, éticos y espirituales, porque sabemos cómo lo manifiesta K. Keeshan[14]:

 “La TV. Sea analógica, digital, por internet; etc… tiene una gran influencia, sobre nuestros hijos, en el desarrollo normal de sus actitudes y es una de las fuerzas más poderosas en la impartición de valores”.

Por otro lado, tocando el tema de los Narguiles, Shishas… no nos vamos a cansar de insistir que fumar es un peligro para la salud, y fumarse un Narguile también mata, y en el islam todo lo que perjudica y causa daño a nuestra salud es un acto ilícito.

“…que les ordena el bien y les prohíbe el mal, les permite todo lo beneficioso y les prohíbe todo lo malo” (Corán 7:157).

Fumar destruye a la persona, dice Dios en el Sagrado Corán: “…y no os autodestruyáis…” (Corán 2:195).

Fumar es una forma de gasto extravagante, mientras Dios dice: “Porque quienes se exceden son iguales a los demonios que siguen a Satanás, y por cierto que Satanás fue ingrato con tu Señor” (Corán 17:17).

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