Las ciencias vinculadas a la botánica,  la herbología ,la agronomía y el arte floral tuvieron,  y aun poseen , una importancia capital en las investigaciones de los sabios musulmanes .Muchos fueron los científicos que en su versatilidad de conocimientos abordaron los tópicos dedicados a las plantas ,su deasrrollo y utilización en la medicina ,la gastronomía , la agricultura y la decoración .Baste  con revisar las obras de Avicenas , Al Farabi o Averroes para dar fe de este asunto.El siguiente artículo del gran investigador Ricardo Elía muestra elementos del desarrollo de estas ciencias en el contexto islámico y su grado de influencia tanto en el Oriente como en Occidente.
La influencia del Islam en Occidente fue variada e inmensa. Del Islam la Europa cristiana recibió alimentos, bebidas, fármacos, medicamentos, armas, heráldica, temas y gustos artísticos, artículos y técnicas industriales y comerciales, costumbres y códigos marítimos y a menudo palabras para estas cosas: naranja, limón, azúcar, jarabe y mil más. Sobre la impronta de la cultura islámica a Occidente trata este artículo del profesor Ricardo H.S. Elías.
El texto titulado Fasl al-maqal, traducido como Doctrina decisiva y fundamento de la concordia entre la revelación y la ciencia, como su mismo título lo explicita, constituye una obra cuyo análisis es de vital importancia a los efectos de esta investigación. En este, Averroes se propone investigar de modo directo el problema de la relación entre la filosofía y la religión musulmana desde una perspectiva “interna”, es decir, la legitimación o exclusión mutua de ambas formas (saber racional y fe) teniendo en cuenta lo declarado explícita o implícitamente en el texto coránico así como las formas del razonamiento estrictamente filosófico o apodíctico.
En pleno siglo XXI muchos países que otrora fueron colonias de las “superpotencias”, hoy han logrado consolidar procesos independientes de autodeterminación y soberanía por los distintos medios que han encontrado, entre muchos de ellos las revoluciones y las guerras para romper los yugos de las colonias, no obstante de ello aún en esta época existen algunas colonias y países que siguen siendo estrangulados política y económicamente por aquellos países que tienen la fuerza física y económica, no dando opción a los países subdesarrollados;  más que el de poder aunar esfuerzos para enfrentarse a estos gigantes despiadados sediento de poder y dinero.
Muchos medios de comunicación, así como gran parte de la sociedad internacional toman la tendencia a comparar y a veces decir que la cultura árabe es lo mismo que la cultura islámica, siendo lo contrario; pues si hablamos de cultura  nos referimos a prácticas, lengua, costumbre y ritos. Los mismos que no tienen una frontera determinada, sino espacios que no siempre tienen que ver con la península arábiga; así por ejemplo hoy el país con la mayor presencia de musulmanes en el mundo es Indonesia, el cual no tiene a la cultura árabe como origen.Siempre que el islam sienta su presencia en alguna región del orbe lleva consigo sus axiomas que son incorporados de manera intercultural en la sociedad o país que llegue. Las pruebas claras de ello es que en muchos lugares donde el Islam está presente aún continúan vivas sus tradiciones nacionales como el  año nuevo, los días cívicos; así como los festivos de la región.
No deja de impresionarnos cómo es que en la República Islámica de Irán por ejemplo, han quedado arraigadas ciertas tradiciones y costumbres culturales como es el caso de Nowruz (Persa ?????) (Nouru), que significa el New Day, es el nombre Iraní de Año Nuevo, en el calendario solar de la Héguira. Nowruz hace referencia también como el año nuevo persa. Nowruz marca el primer día de la primavera y el comienzo del año en el calendario persa. Que ya  está cerca el 21 de marzo aproximadamente.El Nowruz se originó en la zona geográfica denominada Gran Persia (Actual Irán, Afganistán Occidental, Tayikistán y Uzbekistán). La cultura distinta sobre la base de las actividades de lengua, comida, mística y de ocio se desarrolló entre las muchas personas y grupos étnicos que vivían en esta área que se conoce como Pérsico.
Si las presentes sociedades, civilizaciones y culturas no se deben considerar como pertenecientes a diversas especies, no se puede negar que tienen diferentes formas y aspectos. ¿Qué hay de su futuro? ¿Estas culturas, civilizaciones, sociedades y pueblos continuarán existiendo en su forma actual o la humanidad se está moviendo hacia una cierta cultura, civilización y sociedad unificada? ¿Abandonarán las mismas sus individualidades específicas en el futuro, con el objeto de asumir un carácter común, un carácter más cercano a su real naturaleza humana? Este problema también está asociado con el problema de la naturaleza y la esencia de la sociedad y el tipo de relación entre el espíritu colectivo y el espíritu individual.
El molino, varios siglos antes de que fuera usado en Europa, era habitual en los territorios orientales islámicos, y Mas’udi y Estakhri se refirieron a ésto en las características del Sistán de Irán.En Córdoba y Marrueco, la industria del cuero realizó tantos avances, que la palabra cordobés, para quien produce el zapato, y también el material marroquí y Marrueco, para unos materiales producidos de cuero, han quedado inscritas en algunos idiomas europeos hasta la actualidad.Especialmente la influencia de ejercicios de los alquimistas musulmanes en el desarrollo y perfección de la química fue considerable. Aunque, no descubrieron el elixir mágico de la esencia de la vida y la juventud, como imaginaban, ni se propusieron descubrir la piedra filosofal, aquella que puede transformar el cobre enoro.
Unas de las áreas del conocimiento que el Islam insta a tomar para lograr una educación general es la del conocimiento de la historia. Muchos fueron los sabios musulmanes que realizaron viajes a diferentes contextos para, presenciando las huellas del pasado visible en ciudades, monumentos, narraciones orales y textos antiguos, enseñar a varias generaciones futuras sobre la historia del hombre y de la civilización, sus triunfos y tragedias, sus orígenes, esplendores y decadencias. Ejemplo de esto se aprecia en la obra de Al Ya´qubi (m 897), historiador y geógrafo de Armenia, que viajó a la India, el Magred y Egipto para vivenciar la antiquísima historia escondida en las sobras de los templos hindúes y las pirámides faraónicas. Igualmente At Tabari (839-923) investigó la historia de las tierras del Nilo, de los fenicios y de Babilonia en sus viajes a monumentos en Egipto, Siria e Irak. Y es que el Islam siempre ha premiado la búsqueda del conocimiento y su aprehensión desde diferentes modos. El Profeta Muhammad (BP) decía que:“Lo mejor de esta vida y la del más allá está acom­pañado del conocimiento.”
«Puesta en tela de juicio la existencia de un estilo mudéjar, no queda sino considerar lo mudéjar como la continuación del arte hispanomusulmán, tras la desaparición del poder político» (“El mudéjar iberoamericano. Del Islam al Nuevo Mundo”, p. 45). Santiago Sebastián, mudejarista españolLas particulares circunstancias de la historia medieval de España y Portugal, con la presencia del Islam firmemente arraigado en la Península durante ocho siglos, desde la llegada de los musulmanes en marzo de 711 hasta la toma de Granada en enero de 1492, dejaron una huella imborrable en el pueblo español que determinada corriente historiográfica ha minusvalorado sistemáticamente, a pesar de lo cual el célebre historiador Ramón Menéndez Pidal (1869-1968) se vio obligado a definir a España en un conocido estudio como «Eslabón entre la Cristiandad y el Islam» (Austral, Madrid, 1977).