Censura y violación norteamericana (EE.UU.) a los DD.HH. de la periodista musulmana Marzie Hashemi

Sdenka Saavedra Alfaro[1]

La libertad de expresión forma parte de los derechos humanos de las personas y está protegida por la Declaración Universal de 1948[2] y las leyes de todos los Estados democráticos, esta libertad supone que todos los seres humanos tienen derecho de expresarse sin ser hostigados debido a lo que opinan, además que representa la posibilidad de realizar investigaciones, de acceder a la información y de transmitirla sin barreras.

La libertad de expresión está vinculada a la libertad de prensa, que es la garantía de transmitir información a través de los medios de comunicación social sin que el Estado pueda ejercer un control antes de la emisión. La libertad de expresión se entiende como fundamental en una democracia; pero cuando estamos hablando de un gobierno imperialista, en otras palabras de un régimen, o una dictadura como lo es el actual gobierno estadounidense de Donald Trump, estamos hablando, de censura[3], y más específicamente a una violación a los derechos humanos, al querer callar las voces de analistas, o presentadoras de televisión, como ha sido el arresto ilegal, sin pruebas, ni cargos de la presentadora y documentalista de noticias de la cadena Iraní de noticias “Press Tv”, Marzie Hashemi[4], ocurrido el pasado 13 de enero[5], tras su llegada al Aeropuerto Internacional Saint Louis, Lambert, en la ciudad de San Luis, estado de Misuri, ella fue detenida por los agentes del Buró Federal de Investigaciones de Estados Unidos (FBI), y llevada encarcelada a un centro de detención en Washington, antes de alcanzar un vuelo que iba hacia la ciudad de Denver, de acuerdo a declararaciones del mismo medio, Hashemi se encontraba de visita familiar, además de haber realizado un documental sobre el “Movimiento Black Lives Matter” (La vida de los negros importa)[6].

Sobre este tema, muchos analistas internacionales han señalado esta detención a la presentadora de Press TV, es totalmente una violación a los derechos humanos como lo dijimos; pues las autoridades estadounidenses pueden hacer todo lo que quieran porque aunque existan convenios internacionales que respeten la libertad de prensa, el derecho a opinar libremente; etc… siempre estará por encima, la ley de seguridad nacional que prácticamente coarta todas las otras leyes que conocemos[7].

“Esta ley otorga mucha impunidad al gobierno estadounidense a la hora de llevar a cabo detenciones arbitrarias como la de Hashemi, porque cualquier acto puede ser considerado contrario a la seguridad nacional, lo que permite agredir a todos los ciudadanos o extranjeros que acceden o que estén presente en suelo estadounidense”[8].

Al mismo tiempo muchos activistas a favor de los derechos humanos, han manifestado que Hashemi se ha convertido en la voz de la verdad contra los crímenes de Estados Unidos; pues una semana después de su arresto, una corte federal de los Estados Unidos, ha confirmado que la presentadora había sido detenida como testigo material en una investigación federal indeterminada[9].

Cabe señalar sobre el mismo tema, que el Canciller Iraní, Mohamad Yavad Zarif, ha condenado la detención de la presentadora de la cadena de noticias Press TV,  señalando que se trata de un juego político que Washington violando claramente los derechos humanos y el derecho a la libertad de expresión.

“...es un movimiento político e inaceptable de las autoridades norteamericanas que deberían poner fin de inmediato, Estados Unidos como un país peligroso para los periodistas”[10].

Está por demás decirlo, que el discurso xenófobo, discriminatorio, racista e islamófobo de Donald Trump, está más vigente que nunca como ya lo habíamos señalado[11], en estos momentos cuando se ha detenido a una mujer periodista musulmana de color, como lo es Marzie Hashemi,  cumpliendo así el veto la entrada de refugiados e inmigrantes como lo manifestaba desde Siria, Irán, Sudán, Libia, Somalia, Yemen e Irak, países de mayoría musulmana[12], en este caso de musulmanes de Irán; además podemos manifestar que esta detención ilegal parte de una lógica política de las autoridades norteamericanas en el marco de las sanciones que Estados Unidos ha aplicado contra Irán.  

“Durante su reciente viaje a Oriente Medio, el secretario de Estado de Estados Unidos, Mike Pompeo, dijo que Estados Unidos está "redoblando" sus esfuerzos para presionar a Irán, acusándolo de desestabilizar la región”[13]

“Pompeo se comprometió a "expulsar a todas las últimas botas iraníes" de Siria e instó a sus rivales regionales a unirse para enfrentar a Irán”[14].

Debemos recordar que El Presidente de EE. UU., Donald Trump, retiró a los EE. UU. del histórico acuerdo nuclear de Irán de 2015 el año pasado imponiendo nuevas sanciones a Teherán, incluso cuando otros socios en el acuerdo, incluidos China, Francia, Alemania, Rusia y el Reino Unido, han tratado de mantenerlo[15], además de elevar el tono, al aseverar que Irán es un régimen fanático, dictatorial y terrorista.

“Frente a la discreción de sus asesores, volcados en minimizar el incendio, Trump trazó un aguafuerte de un “régimen fanático, dictatorial y terrorista”. Un semillero mundial de “destrucción y muerte” que tiene que ser frenado. “Irán nunca tendrá la bomba atómica. Las agresiones no han dejado de incrementarse y es hora de ponerles fin””[16].

¿En ese sentido, cuál es el plan del imperialismo para la República Islámica de Irán?, al detener injustamente a una periodista, de una cadena iraní, además de ser musulmana?, nos adheriremos a las protestas que condenan este encarcelamiento, que vienen de todo el mundo, incluida la del Movimiento de Nigeria (IMN), que señala su preocupación por el arresto de Hashemi, por parte de un país que dice ser un modelo a seguir en justicia y en defensa de la libertad y de los derechos humanos[17].

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