Medios Hegemónicos del Imperio; Libertinaje y libertad de empresa
Sdenka Saavedra Alfaro[1]
La Censura a las cadenas informativas como las que realiza el buscador de la firma estadounidense Google, a agencias de noticias y cadenas alternativas de noticias como: HispanTV, PressTv, IRIB (Servicio Exterior de la Radio y Televisión de la República Islámica de Irán), la agencia Al ManarTv (estación de televisión por satélite de Hezbolá), la Agencia Árabe Siria de Noticias (SANA), la Agencia de Noticias Palestinas Abu Yihad ABUJNA, o a toda página, o medio alternativo independiente que brinda información desde el lugar de los hechos, es bloqueado por los medios hegemónicos de poder.
La censura también llega a todo analista, crítico, activista o escritor, que tenga un enfoque distinto al de la hegemonía estadounidense.
Estos acallamientos de la verdad, violan el derecho internacional; ya que “El derecho a la libertad de expresión está consagrado en el artículo 19 de la Declaración Universal de Derechos Humanos, que describe sus elementos fundamentales como derecho consustancial a todas las personas”.
En la actualidad, el papel de los medios hegemónicos, ya no es el de informar, educar y entretener; todo lo contrario, ese rol se ha convertido en un arma fundamental utilizada por la burguesía para someter a los pueblos. Como ya lo han señalado muchos investigadores, teóricos e intelectuales: la censura injustificada devela la ausencia de libertad de prensa, a la par con el fenómeno de los Fake News cuyo fin es destruir la imagen de países al denominarlos como países parte del “Eje del Mal”, “Estados fallidos” o hacerlos ver como Terroristas como a Irán, Siria, Yemen, China, Corea del Norte y ahora Rusia; pero no sólo los destruyen, sino que los sancionan y bloquean.
Con ello contrastamos, lo que Louis Althuser, Herbert Shiller, Noam Chomsky, u otros intelectuales manifiestan, que los Medios Corporativos son instrumentos de la expansión imperialista, que están al servicio del poder político y económico, bajo el control de las macroempresas, de las transnacionales, de los monopolios de poder; tal cual lo manifestamos en el texto; “Terrorismo, Islam y Medios de Comunicación en la Era de la Globalización”, donde señalamos que en los medios hegemónicos no existe la libertad de expresión, sino el libertinaje y la libertad de empresa, pues la manipulación mediática surge del interés de los grupos dominantes por conformar una conciencia colectiva, porque estamos gobernados por esta dictadura de los grandes empresarios, de los banqueros que manejan la economía del mundo quienes siempre han sido y son obsecuentes con el nuevo orden mundial.
Estos “amos del poder del mundo”, se encuentran silenciando las crueles invasiones que el imperialismo, junto al sionismo y sus huestes cometen, quienes cercenan vidas, territorios, cometen genocidio, crímenes de guerra, apartheid; etc., yuxtaponiendo el Derecho internacional humanitario a sus intereses espurios.
Así por ejemplo, Yemen muere ante los ojos del mundo, cada diez segundos muere un niño bombardeado o por hambre; sin embargo gran parte de la Comunidad Internacional no hace nada al respecto, pues ellos también son víctimas de “los amos de la información”, pues presentan shows, circo y parafernalia y no las mutilaciones y asesinatos que comenten sus títeres y alfiles en el mundo.
Cuando las élites de poder encaramadas en el sionismo o el imperialismo no pueden someter a la información simplemente borran a los periodistas, como lo que está pasando en Palestina, donde el régimen sionista intolerante de Israel, lleva ya 74 años cometiendo Apartheid, “limpieza étnica”, en donde, si es que hay un informante (periodista, investigado o cualquier civil), la entidad sionista lo elimina físicamente, tal cual ocurrió recientemente con la Periodista de la cadena catarí de Al Jazeera, Shireen Abu Akleh.
Otro ejemplo de ello, es Julián Assange, el creador de Wikileaks, quien reveló los vejámenes que cometieron los soldados estadounidenses a la población civil, en Irak, y en Afganistán, preso desde el 2010, y al que lo quieren silenciar hasta su muerte, quién señaló: “Google es el gran hermano al servicio de Estados Unidos”.
Otrora los aparatos ideológicos del estado: la escuela, la iglesia, la familia, adoctrinaban a las masas, hoy eso ha cambiado y se ha multiplicado. De tal manera que en la actualidad el pensamiento de los hombres es administrado y dosificado por estas corporaciones apoyadas y muchas veces establecidas por las superpotencias que quieren doblegar a los hombres, despojándolos de sus territorios; así como de sus recursos.
En pleno Siglo XXI (hoy más que antes), los hombres deben tomar medidas y decisiones para que los medios corporativos dejen de oprimirlos y coaccionarles con un pensamiento único, aquél que sólo a ellos (oligarquías y emporios de poder) les interesa.
Demostrar y demostrarnos a nosotros mismos dónde está la verdad es una labor vital en este siglo, pues de no ser así estaremos dominados, coaccionados, aprisionados y esclavizados por las garras del imperio, quienes contra la voluntad de los hombres y mujeres imponen sus “verdades” de “Paz, libertad y democracia”, falacias y demagogias que tienen como fin subyugar a la humanidad. Nosotros no somos ovejas, ni mucho menos un rebaño ¿o sí? ....
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[1] Periodista y escritora boliviana antiimperialista, “Instituto de Análisis en Geopolítica Qasem Suleimani”